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Hanamura Kazuma · 3/03/2019, 19:55

Kazuma comenzaba a comprender de a poco, aunque el tema aun le superaba por mucho. Ahora sentía que su primera misión, con todos sus tropiezos y dificultades, había sido muchísimo más simple que la compleja mecánica de la cita que aún tenía por delante.

—Creo que, con lo que me ha revelado, podre manejarme mejor que la última vez —comento, mientras recordaba el pasado encuentro—. En esa ocasión, ante el último de sus movimientos, mi piel se hizo calurosa, casi afiebrada, y mi mente se nublo densamente, como si no pudiera pensar con claridad… fue algo raro…

»¿No le ha pasado?

Eikyuu Juro · 5/03/2019, 01:46

Kazuma parecía un poco mejor, aunque el sentimiento de incomodidad y de horror aún seguía en él. El pobre diablo estaba asustado, pero así, también aprendería. Katsue supo que no podía hacer nada contra eso: era natural que Kazuma estuviera así, y él mismo tendría que luchar contra ello.

Sin embargo, los consejos que le había dado eran auténticos. Y esperaba que tras saber las intenciones de la chica, él pudiera reccionar mucho mejor.

»¿No le ha pasado?

— Por supuesto. El amor también tiene ese efecto, para ambos lados — comentó Katsue, con una sonrisa —. Es un arma muy poderosa, ¿sabes? Hace perder la razón a las personas. Supongo que esa sensación no te gusta, ¿verdad? Ataca a tu permanente serenidad. Pero es algo normal , y está en nuestra propia naturaleza.

» Atracción, deseo, amor... llámalo como quieras. Pero eso significa que sientes algo por ella — Katsue empleó un tono burlón —. No te preocupes tanto, Kazuma-kun. Dejate llevar. Esa sensación no es mala. Sientes un dolor en el estómago que amenaza con devorarte, y un calor como el infierno, pero es una forma de sentirte vivo.

Hanamura Kazuma · 5/03/2019, 18:02

—Bueno, me gusta sentirme vivo —reconoció con una tenue sonrisa.

Las emociones intensas no eran lo suyo; y no era que le desagradasen, era que no estaba acostumbrado a los cambios bruscos e impredecibles; aunque con la adolescencia comenzando a romper en hervor, aquello podría convertirse en una cotidianidad. Pero ahora tenía un objetivo enfrente, algo que debía llevar a cabo correctamente, y necesitaba de toda la firmeza y el conocimiento disponibles.

—En mi pueblo dicen que “la manta siempre se deshace a partir del hilo suelto” —comento, a manera de señalar que los pequeños errores podían arruinar las grandes obras—. Quisiera saber qué cosas me desaconsejaría, que actos o aptitudes debería evitar para no arruinar la cita.

Eikyuu Juro · 7/03/2019, 01:09

Quisiera saber qué cosas me desaconsejaría, que actos o aptitudes debería evitar para no arruinar la cita.

Si, para un shinobi, esa era una buena frase. Katsue pensó que, si era así de ingenioso con ella, probablemente no tendría problemas. Al menos, en lo que respectaba a su cita. El problema de la hermana era de otro calibre, y ahí ya no sabía que podía decirle para no fastidiarla.

Si al menos conseguía una buena cita...bueno, habría conseguido su objetivo. Lo que el destino ya hiciera con él luego ya no era su problema.

— Bueno, pareces un chico bastante formal, así que no creo que haga falta decirte los típicos comportamientos estúpidos: ten modales en la mesa, mastica con la boca cerrada... — Katsue movió la mano, con un gesto impaciente —. Si su hermana es conservadora, apreciara que seas caballeroso. Ya sabes, esas idioteces de abrir la puerta para que entre primero, o de ofrecerle la silla, como si no fuera capaz de hacerlo por sí misma. Perdona, no soporto eso. También te dije que llevar un regalo era algo adecuado.

» Pero si quieres comportamientos para no arruinar tu cita, de verdad. Entonces te diría que trates a esa chica como si fuera el centro de tu mundo en ese momento. Prestale atención y dale conversación, intenta no ser callado. Sonrie y muestrate amable. Hablale de tí, pero no demasiado, si no quedaras como una persona egocéntrica. — Katsue pensó —. Si vais a ir a cenar o consumir algo, el tema de la cuenta es algo controversial. Supongo que un caballero se ofrecería a pagar, pero eso depende de cada quien. Yo siempre he odiado que me paguen la comida.

Hanamura Kazuma · 10/03/2019, 17:12

Kazuma bebió de las palabras de Katsue y luego las vertió en una libreta que saco apresuradamente. No era más que un pequeño cuaderno de notas, pero registrar allí la serie de consejos otorgados le permitiría estudiar tranquilamente la estrategia que habría de tomar; cosa que no podía hacer si le dejaba todo a su memoria.

—Hay otra cosa en la que tengo interés: usted dijo que sería adecuado llevar un regalo —apunto—. ¿Estaria bien que llevase algunas galletas o bizcocho hechos por mí? Digo…, creo que le gustaría, pero lo tradicional parece ser que sea la chica la que haga halagos a través de comida (aunque Miou-san no tiene idea de cocina).

»Si usted estuviese en una cita, ¿no le parecería raro que el hombre llevase galletitas y magdalenas hechas por él?

No podía evitar mostrarse un poco avergonzado al hacer esa pregunta; pues no recordaba en relato alguno que el príncipe o el héroe comenzara su historia de amor llevando galletas a su enamorada…

Eikyuu Juro · 14/03/2019, 00:21

Katsue no pudo evitar soltar una carcajada. Parece que el pequeño Kazuma se dedicaba a la cocina en sus ratos libres. Eso sí que era gracioso.

»Si usted estuviese en una cita, ¿no le parecería raro que el hombre llevase galletitas y magdalenas hechas por él?

— Desde luego, no es lo convencional — admitió la mujer, aunque luego, se encogió de hombros —. Tienes razón. Antes se decía mucho que los hombres eran los duros, los que enseñaban músculo y volvían a casa después de pasarse el día trabajando,y las mujeres, las que cocinaban y estaban a sus espaldas. Pero si me permites decirlo, eso era una estupidez. Siempre han existido hombres que han cocinado, y desde luego, te puedo asegurar que ha habido grandes mujeres, empezando por las kunoichis que han existido y siguiendo por todas las demás.

» Kazuma-kun, entiendo que te pongas nervioso por el "protocolo". Pero tu mismo lo has dicho: si crees que le gustará, adelante. Claro que su hermana puede hablar, pero... ¿Qué crees que es más importante? ¿Su felicidad, o lo que diga la mujer? Quiero decir, puedo darte mil y un consejos, pero al final, el objetivo de la cita es complacer a la persona con la que sales, ¿sabes?

Hanamura Kazuma · 14/03/2019, 16:37

—Sí, tiene razón, eso es lo importante —concedió.

Kazuma comprendía a su propia manera la interpretación de Katsue: había un límite de cuanto debía tener en cuenta; pues las variables eran infinitas y debía limitar su escasa atención a las que fuesen de mayor importancia.

—Gracias por ayudarme compartiendo sus conocimiento, Katsue-san —dijo de pronto, haciendo una leve reverencia.

Eikyuu Juro · 18/03/2019, 01:04

Kazuma, tras todas las enseñanzas que se le habían dado, realizó una reverencia a su nueva "sensei". Entonces, agradeció el tiempo que le habían dado.

—Gracias por ayudarme compartiendo sus conocimiento, Katsue-san

La hermana de Juro sonrió un poco. En el fondo, el chico no era tan malo. Un poco rarito, sí, pero bueno. Si la chica ya lo conocía y sabía cómo era, ¿Qué podía pasar? Por lo que decía, ella ya tenía unas intenciones claras. Mientras el chico no la cagase, todo iría bien.

Katsue, quien nunca había experimentado el placer de la docencia, asintió ante las palabras de Kazuma.

— No ha sido tan aburrido como pensaba — admitió —. Espero que vaya bien tu cita, Kazuma. Estas nervioso, pero creo que lo harás bien. Solo intenta recordar lo que te he dicho.

» Y por supuesto... no olvides usar tu instinto.

Hanamura Kazuma · 22/03/2019, 00:14

Ahora estaba tan listo como podía estarlo, o al menos eso era lo que se decía a sí mismo. Había un límite en lo que podía planear y suponer; por lo que para lo demás tendría que esperar el momento, confiar en sus instintos e improvisar.

Sintiéndose más tranquilo y preparado, Kazuma comenzó a caminar para abandonar la parte trasera de la tienda, que ya no le parecía una ominosa sala de interrogatorios.

—¿Sigue aquí, Juro-sensei? —preguntaría en cuanto saliese al despacho.

Eikyuu Juro · 24/03/2019, 17:40

Kazuma encontraría a su sensei tal y como lo dejo, al mando de la tienda de armas que regentaba su familia. Estaba sentado en un taburete, con gesto ausente, apoyando su mano derecha sobre la barbilla.

Sí, no pasaba mucha clientela por ahí. Sería el día o la época.

En cuanto el jounin escuchó las palabras de su alumno, se espabiló rapidamente, y regresó a su actitud serena, firme y clara. Observaría a Kazuma, expectante.

— ¡Kazuma-kun, me alegro de que estés bien! — Su hermana no era un monstruo, pero tampoco una santa —. ¿Qué tal ha ido todo?

Hanamura Kazuma · 24/03/2019, 19:26

—¡Kazuma-kun, me alegro de que estés bien! —Su hermana no era un monstruo, pero tampoco una santa—. ¿Qué tal ha ido todo?

—Ha sido fantástico, Juro-sensei, me ha explicado muchas cosas interesantes —aseguro mostrándose un tanto emocionado.

Kazuma sentía que la habilidad para enseñar era algo que se debía de llevar en la sangre, pues sentía que había aprendido con Katsue tanto como solía hacerlo con Juro… Aunque la hermana de su sensei resultaba un tanto intimidante.

—Creo que ya le hemos quitado bastante tiempo a Katsue-san —dijo discretamente, dando a entender que, ya terminados sus asuntos, lo mejor era marcharse.

Eikyuu Juro · 27/03/2019, 00:52

Juro no pudo evitar sorprenderse ante las palabras de su alumno, quien parecía, ciertamente, muy satisfecho con las lecciones que le había dado su hermana.

—Creo que ya le hemos quitado bastante tiempo a Katsue-san — dijo Kazuma, discretamente. Juro se espabiló entonces, recobrando la razón. Fuese lo que fuese que hubiera hecho su hermana, debía de haber funcionado. Luego hablarían seriamente.

— S-si. Vamonos.

Tras despedirse, ambos abandonaron la tienda de la familia de Juro. Una vez fuera, el mariontetista trató de contener sus recelos, y resumió sus dudas en una única pregunta.

— ¿Estas preparado entonces? ¿Cuándo será la cita?

Hanamura Kazuma · (Última modificación: 28/03/2019, 23:55 por Hanamura Kazuma.)

El camino se hacía más agradable ahora que ya no tenía tantas dudas, aunque su silencio era evidencia de que eran muchas las cosas que se agitaban en su mente.

—¿Estás preparado entonces? ¿Cuándo será la cita? —pregunto Juro.

—Katsue-san dijo que no debería tardarme mucho, pero siento que si no me tomo las cosas con calma tropezare —puntualizo—. Se supone que se me espera para proponer la cita (al menos eso espera la hermana mayor), pero iré a mi propio ritmo, no al suyo: por hoy descansare, mañana me dedicare a escribir una buena carta y a planear la salida, y pasado mañana será la cita (así, de un día para otro, no le dará tiempo de maquinar algo en mi contra).

Se quedó viendo a su sensei por unos instantes, buscando alguna reacción.

—Creo que es lo más conveniente… —Suspiro— ¿Piensa que estoy siendo exagerado?

Eikyuu Juro · 30/03/2019, 00:58

Juro escuchó las ideas de su alumno. Sintió ganas de reírse: se lo estaba tomando muy pero que muy a pecho. Aunque Kazuma era tranquilo de naturaleza, empezaba a conocerle. En su mente, ahora mismo, se debía de estar agitando una verdadera tormenta de pensamientos y emociones.

Sabiamente, su alumno había decidido que era mejor no apresurarse, y pensarselo bien antes de actuar. Eso era un buen consejo, desde luego.

« Pero conforme más pasa el tiempo, más pesada se hace la carga, y al final, las personas abandonan su objetivo » — Igualmente, Kazuma parecía ser consciente de esto, puesto que no se había marcado una fecha demasiado larga. Tan solo dos días. Era suficiente.

Asintió, sonriendo.

— Creo que es una decisión sabia, Kazuma. Tienes mucho en lo que pensar, supongo — Juro le puso la mano en la cabeza, sin poder evitarlo —. Pero no te quemes mucho la cabeza, ¿vale? Estoy seguro de que en realidad, por dentro, tú ya sabes lo que tienes que hacer.

» Dos días está bien, no te preocupes.

Hanamura Kazuma · 30/03/2019, 19:02

—Creo que es una decisión sabia, Kazuma. Tienes mucho en lo que pensar, supongo —Juro le puso la mano en la cabeza, sin poder evitarlo —. Pero no te quemes mucho la cabeza, ¿vale? Estoy seguro de que, en realidad, por dentro, tú ya sabes lo que tienes que hacer.

»Dos días está bien, no te preocupes.

Kazuma sonrió mientras la mano de su sensei aplanaba sus alborotados cabellos; aunque en su interior sabía que no preocuparse era una de las cosas más difíciles que una persona podía hacer.

—...Aquí nos separamos —dijo en cuanto llegaron a un cruce de caminos—. Sensei... —le llamo de pronto, antes de alejarse demasiado, antes de que Juro se girase y no pudiese ver su reverencia—. ¡Gracias por todo, de verdad se lo agradezco!