Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
Tras la primera ronda, los participantes se sometieron a los cuidados médicos de las Tres Grandes Aldeas, que consiguieron que se recuperaran a tiempo para la segunda parte del evento, que ocurriría dos semanas después. Algunos necesitaron apenas unos días para estar en forma, otros más de una semana, pero al final, no hubo que retrasarla.
Para esta segunda ronda, se supuso que los participantes ya conocían el procedimiento, de modo que no se les explicó nada, tan sólo se les recogió, de nuevo, uno a uno, y se les condujo a sus respectivos cubículos.
Y a su debido tiempo, cada uno escucharía su llamada. Las puertas volverían a abrirse, el clamor del público volvería a llegar a ellos...
...y de nuevo, sería hora de combatir.
—Desde la publicación de los combates, habrá un plazo de cortesía de 7 días, durante los cuales deberán contestar los dos participantes, sin rolear que ven al contrario, a no ser que haya entrado ya en escena. Sólo que en esta ocasión los combates son fijos. Si faltas al combate tu contrario pasa a la siguiente ronda y se roleará que tú te has rendido o no te has presentado a la batalla.
—A partir de ese momento, los usuarios deberán postear como máximo cada 72 horas. Si alguien se sale del período, con ausencia justificada o sin ella, se le saltará el turno y el oponente podrá manipular que recibe un ataque no letal, lo haya ejecutado en el turno de antes o no. Si se ha ejecutado en el turno de antes, lo encajará con éxito. Si esto ocurre dos veces seguidas, el usuario que esté activo manipulará un ataque que dejará al contrincante incapacitado.
—Si alcanzamos la fecha del uno de septiembre, este período pasará a ser de 48 horas.
—Si alcanzamos la fecha del diez de septiembre, este período pasará a ser de 24 horas.
—Saltar el turno o declarar la derrota del oponente es obligatorio.
—Si dos oponentes no están de acuerdo en algo, tienen que discutirlo por privado y luego, si no llegan a un acuerdo, pedir un master educada y tranquilamente. Cualquier situación de tensión podrá ser sancionada con la expulsión del torneo, con la retirada del permiso de participar en más eventos o incluso con penalizaciones de experiencia.
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11/08/2017, 11:52 (Última modificación: 11/08/2017, 21:08 por Uchiha Akame.)
Cuando las puertas se abrieron, por una de ellas salió un muchacho cabizbajo. Vestía una camisa negra de mangas largas y cuello alto con el símbolo del Clan Uchiha a la espalda, pantalones cortos de color arena y sandalias ninja. Su pelo, negro como la noche, estaba recogido en una coleta que le llegaba poco más abajo de los hombros. Pese a que llevaba su portaobjetos atado en la cintura, en el lado derecho, y una espada de color obsidiana cruzada en la espalda, no parecía muy excitado con el combate.
El público aplaudió y vitoreó, pero Akame no les dedicó siquiera una mirada. No podía. Sus ojos, rojos como la sangre y con tres aspas alrededor de cada pupila, se mantenían fijos en el suelo frente a él. La hierba primero, y el sendero de tierra que le llevaba hasta el tatami donde supuestamente debía batirse contra un oponente digno. Luego, las escaleras de madera. Y, finalmente, al colocarse donde le correspondía, alzó la mirada y escrutó la puerta contraria.
Pese a que poca gente en el público le recordaba —los combates habían sido muchos y él no era precisamente el shinobi más carismático del Torneo—, se hizo un silencio sepulcral. Podía notarse que algo andaba mal con el gennin. Si alguno le recordaba de la ronda anterior, tendría que emplearse a fondo para relacionar aquella sombra con el muchacho vivo, cortés y habilidoso con el Katon.
Allí estaba, de nuevo. En esa habitación más sosa que un Kuseño hablando de su vida, esperando a que la puerta se abriese y descubrir a mi oponente al otro lado de la arena, la cual presumía que sería una copia exacta de la última. Desde luego los kages eran menos originales que un Amenio intentando un paisaje, porque siempre lo dibujan nublado. Sí, me he visto obligado a explicar esa puya.
Pero no penseis que el gran Nabi Nabi de Nabigakure se había quedado de brazos cruzados entre ronda y ronda. Había hecho calculos, eramos cuatro Uzuneses pasando de ronda, contando que uno de ellos soy yo, eran tres posibles contrincantes de mi villa. De nueve que eran mis rivales en potencia eso me dejaba con un 33,3333333333333333333333% de que me toque uno de la gran y todopoderosa Uzushiogakure. El resto eran cuatro sucios amenios y dos pobres kuseños.
La probabilidad estaba de mi lado, y si la probabilidad está de tu lado tienes medio combate ganado. Salí a la arena con confianza, con el aura poderosa de quien sabe que las matematicas no engañan. Un 66,66666666666666666666666% estaba conmigo, dandome fuerza.
Hasta que estuve lo suficientemente cerca de él como para contemplar mi interminable mala suerte.
— ¡Venga, hombre! ¿En serio? ¡¿Otra vez?!
Me lleve las manos a la cara de pura desesperación, tras lo cual recordé que era notoriamente más inteligente que Kotetsu, igual él sí entraba en razón.
— Hey, Akame-san. ¿Qué te parece si hacemos un combate traidicional tranquilito? Ya sabes, sin grandes bolas de fuego ni explosiones. Solo un poco de Taijutsu y shurikens volando y chocando echando chispas. Al fin y al cabo, eso es lo que es un buen duelo shinobi. Sin ir a quemar vivo a nadie ni a empalarle con una katana del quince. ¿Qué me dices, compañero? ¿Hermano de villa?
Cada apice de mis dotes diplomaticas iba en esas palabras, que sonaban logicas pero que por algún motivo ya me habían ignorado un par de veces.
16/08/2017, 01:14 (Última modificación: 16/08/2017, 01:18 por Uchiha Akame.)
«Senju Nabi, ¿así que otro ninja de Uzushiogakure?»
Akame había indagado en el resto de emparejamientos de la primera ronda y sus pesquisas le habían llevado hasta el número de participantes que habían superado los combates preliminares. Uzu y Ame estaban empatadas en miembros, mientras que Kusa se quedaba ligeramente atrás. Aun así, el Uchiha —que ya había tenido que eliminar a una kunoichi de su propia Aldea para avanzar a la segunda ronda— no esperaba tener que batirse otra vez contra alguien del Remolino.
«Menuda lata, por Amaterasu. Parece que amañan los emparejamientos para que nos eliminemos entre nosotros...»
Nabi no tardó en mostrarse de acuerdo con aquella disconformidad, de forma mucho más notoria. No sólo se quejó a viva voz por tener que enfrentarse, también por segunda vez, a un uzujin... Sino que le propuso modificar las normas del encuentro, según él, en favor de la integridad física de ambos. Akame alzó una ceja con visible escepticismo.
—Nabi-san, me temo que lo que pides sería muy poco... —carraspeó—. Profesional por mi parte.
El Uchiha flexionó las rodillas ligeramente mientras examinaba de arriba a abajo a su oponente con el Sharingan en los ojos. Luego habló de forma tan metódica como solía hacerlo cuando analizaba una situación de combate.
—Si temes por tu integridad física, debo decirte que no tienes de qué preocuparte. He examinado tu chakra, así que podré hacer una estimación de cuánta potencia he de dar a mis técnicas para no matarte —agregó con una sonrisa afable.
«Senju Nabi... Doton. También lleva una espada, así que supongo que sabrá defenderse en cuerpo a cuerpo. A parte de eso, su nivel chakra no es especialmente alto y tampoco parece muy fuerte o rápido. No debo confiarme», concluyó el Uchiha. «Tanteemos el terreno, Nabi-san...»
Akame inició una breve carrera hasta recortar distancias con su rival. Cuando estuvo a unos cinco metros se llevó una mano al portaobjetos y sacó un par de estrellas metálicas que luego lanzó hacia su oponente. Los shuriken iban dirigidos a ambos flancos del Senju, uno al diestro y otro al siniestro, formando ligeras parábolas.
Estado de Akame
PV:
170/170
– CK:
167/180
–
+5
–
Reg. dividida
–
Inventario
Hitai-ate de Uzushiogakure [en la frente]
Mecanismo oculto de kunai (x1 kunai) [en la muñeca derecha]
Portaobjetos básico [en la cadera derecha]
Hilo shinobi (x1, 3 usos)
Shuriken (x5)
Hikaridama (x1)
Píldora de soldado básica (x1)
Antídoto (x1)
Ninjatō [a la espalda]
San Tomoe no Sharingan activado
x2 Acciones Ocultas
¤ San Tomoe no Sharingan ¤ Ojo Giratorio de Tres Aspas - Tipo: Apoyo - Rango: S - Requisitos: Uchiha 60 - Gastos: 18 CK (divide regen. de chakra) - Daños: - - Efectos adicionales: Destreza, Inteligencia y Percepción +9, Poder + 6 - Sellos: - - Velocidad: Instantánea - Alcance y dimensiones: -
El célebre y temido Dōjutsu del clan Uchiha. Los miembros del clan no nacen con él, si no que lo desarrollan durante una situación de gran estrés o con riesgo de muerte. En su forma completa, el Sharingan transforma los ojos del usuario volviendo de color carmesí sus dos iris. Tres tomoe (coma) rodean a la pupila siguiendo una circunferencia imaginaria.
Un ojo con tres tomoe permite al Uchiha predecir la imagen del siguiente movimiento de un atacante, desde los cambios más evidentes de posición hasta la tensión más minúscula en uno de sus músculos de su cuerpo. Observa todos los detalles de las acciones del oponente con precisión, permitiéndole optimizar sus movimientos y preservar su chakra reaccionando ante estas acciones de forma eficiente. Les permite sincronizar sus movimientos para evitar ataques antes de que lleguen o para golpear en un area momentos antes de que su oponente esté incluso en ella.
Las tres aspas otorgan la habilidad de ver completamente a través del Genjutsu, y, de forma natural, de devolvérselos a su ejecutor sin apenas el uso de sello alguno (pagando el CK correspondiente). El tres aspas también otorga al Uchiha la habilidad suficiente como para introducir Genjutsu en la mente del oponente tras establecer contacto visual (ver técnicas).
El sharingan de tres aspas otorga la habilidad de ver el chakra de seres vivos y externos, como en sus versiones anteriores. La habilidad de copiado de sellos y técnicas también se extiende: ahora, el usuario es capaz de memorizar las tres técnicas límite y quedárselas en su repertorio hasta que lo considere oportuno (siempre que su facultad de Uchiha tiene igual o más valor que los requisitos de dichas técnicas).
—Nabi-san, me temo que lo que pides sería muy poco...Profesional por mi parte.
Mierda, se me había olvidado nuestra última conversación, el gran Uchiha Akame quería aquel poderoso enchufe al Examen de Chunin. Bueno, yo lo había intentado, de nuevo, y, de nuevo, parece que iba a tener que enfrentarme a un loco y sanguinario compañero de villa bajo la atenta mirada de mi kage. No iba a faltar a la orden expresa de que el duelo sea justo y digno, aunque tampoco quería empezar a provocar terremotos contra bolas de fuego.
— Venga, Akame-kun, que no estamos en una misión, no somos enemigos, no hay un motivo ulterior para este combate. Kotetsu no paró de soltar katanazos con esa pedazo espada suya, uno de esos podría haberme dejado manco, ¿ahora vas a intentar achicharrarme? ¡Que somos aliados!
—Si temes por tu integridad física, debo decirte que no tienes de qué preocuparte. He examinado tu chakra, así que podré hacer una estimación de cuánta potencia he de dar a mis técnicas para no matarte —
Encima ahora iba de sobrado, yo aquí preocupandome por mis compañeros de villa y ellos vacilandome, hasta mi paciencia de salvador de uzuneses tiene un límite y con Kotetsu la verdad es que ya estaba tocado de los cojones para rato.
Cuando empezó a correr hacia mi no dudé en sacar mi Kodachi de su funda, si esto tenía que acabar, al menos intentaría que fuera breve. No iba a pasarme otra vez medio año pegando y asegurandome de que no se muriese igual que con el otro lerdo.
Esta vez empezaría y acabaría con todo y que sea lo que Gouna-sama quiera. Esperé sin moverme al momento apropiado con mi katana apuntando en la dirección en la que se acercaba Akame, y cuando lanzó los shurikens, uno a cada lado para cerrarme escapatorias haría el sello del carnero con la zurda y bajaría un poco la Kodachi. En menos de un instante aparecería justo ante él con la espada en mi diestra buscando penetrarle su pierna izquierda, si lo conseguía, rápidamente la sacaría de su carne para defenderme de un posible contraataque.
Estado de Nabi
150/150
–
116/130
– -
14
–
—Inventario:
- Hitai-ate [Cuello]
- Portaobjetos basico (9/10) [En el lado izquierdo del abdomen]
Bomba de luz
Bomba sonora
5 shuriken
Bomba de humo
Hilo shinobi
- Kodachi [Diestra]
- Mecanismo oculto de kunai [muñeca izquierda]
Kunai
¤ Sunshin no Jutsu ¤ Técnica del Parpadeo Corporal - Tipo: Apoyo - Rango: D - Requisitos: Ninjutsu 40 - Gastos:
14 CK/20 metros
52 CK para huir de un combate
- Daños: - - Efectos adicionales: Cada uso restará 10 puntos de aguante durante los próximos 5 turnos - Sellos: Carnero/una mano - Velocidad: Instantánea
El Sunshin no Jutsu es una técnica basada en un movimiento ultrarrápido, permitiendo a un ninja moverse de cortas a largas distancias a unas velocidades casi imperceptibles. Para un observador cualquiera, resulta como si el usuario se hubiera teletransportado. En ocasiones, se utiliza una pequeña señal para camuflar los movimientos iniciales del usuario. Esta técnica se basa en el uso del chakra para vitalizar temporalmente el cuerpo y moverlo a velocidades extremas. La cantidad de chakra requerida depende en la distancia total y la elevación entre el usuario y el destino. La técnica puede usarse, además, para escapar del campo de batalla. Las diferentes villas tienen variaciones de esta técnica, e incluyen un elemento extra para distraer al oponente. En Konoha, se utiliza un rastro de hojas.
16/08/2017, 21:41 (Última modificación: 17/08/2017, 00:24 por Uchiha Akame.)
El Uchiha fijó su vista en las manos de Nabi, que con una desenfundó su espada y con la otra formó el sello del Carnero. Conocía aquella técnica. El Senju desapareció en un parpadeo y volvió a reaparecer frente a Akame... Aunque seguramente no como él se esperaba.
Los dos shuriken arrojados por el Uchiha no eran más que una mera distracción; la verdadera amenaza habían sido, desde el principio, otras dos estrellas metálicas ocultas bajo la sombra de las primeras y unidas por un fino hilo metálico que acababa en la mano diestra del gennin. Había preparado aquel sencillo artilugio durante la espera, en el cubículo del aburrimiento; y no tardó en sacarle provecho. Debido a su trayectoria, Nabi acabaría llevándose el hilo por delante a velocidad ultrarrápida gracias al Sunshin. Los shuriken señuelo seguirían su trayectoria hasta caer a unos diez metros de donde se encontraban los gennin, mientras que los que estaban atados con hilo se enrollarían a gran velocidad alrededor del torso del Senju, aprisionándole los brazos y clavándose finalmente en su cuerpo.
Como resultado de la maniobra, Nabi podría quedar aprisionado por los hilos metálicos del Uchiha. Sin embargo, y antes de que esto pudiera surtir efecto, quedaba el asunto del filoso acero del Senju; que se dirigía directo a la pierna de Akame. Éste había previsto el movimiento con su Sharingan, pero incluso así apenas pudo apartarse lo justo como para no recibir una clavada directa. El gennin apretó los dientes al notar el frío acero rajándole parte del muslo, y trató de sobreponerse mientras sus manos se entrelazaban.
—¡Katon! ¡Ryūka no Jutsu!
El Uchiha se llevaría un extremo del hilo a los labios y soplaría con fuerza. Un torrente de llamas avanzó, feroz, por el cable metálico hasta Nabi, quizás envolviéndole en una tormenta de fuego que terminaría por calcinar completamente los hilos y liberarle de sus ataduras.
Akame retrocedió un poco más, hasta colocarse a unos seis metros del Senju.
—Creo que es suficiente, Nabi-san —dijo, tratando de imprimir firmeza a su voz.
Estado de Akame
PV:
152/170
–
-18
–
CK:
124/180
–
-7
–
-36
–
Inventario
Hitai-ate de Uzushiogakure [en la frente]
Mecanismo oculto de kunai (x1 kunai) [en la muñeca derecha]
Portaobjetos básico [en la cadera derecha]
Hilo shinobi (x1, 1 uso)
Shuriken (x3)
Hikaridama (x1)
Píldora de soldado básica (x1)
Antídoto (x1)
Ninjatō [a la espalda]
San Tomoe no Sharingan activado
x2 Acciones Ocultas reveladas: atar hilo a dos shuriken y colocarlos usando el Kage Shuriken no Jutsu
¤ Kage Shuriken no Jutsu ¤ Técnica del Shuriken en la Sombra - Tipo: Apoyo - Rango: D - Requisitos: Shurikenjutsu 10 - Gastos: 7 CK - Daños: - - Efectos adicionales: Permite ocultar un arma de lanzamiento en la sombra de otra del mismo tipo - Sellos: - - Velocidad: Instantánea - Alcance y dimensiones: -
La técnica más básica del shurikenjutsu.
El usuario lanza de manera simultánea dos armas del mismo tipo (dos shuriken, dos fūma shuriken...), de manera que una queda perfectamente por encima de la segunda. El truco está en atraer la atención del oponente sobre el arma superior para que no se dé cuenta de la segunda. Sin embargo, y aunque dependiendo del modo en que se emplee la técnica puede ser realmente útil, si el enemigo se da cuenta del engaño, esta pierde gran parte de su eficiencia.
(Shurikenjutsu 50) Kage Hitoku Shuriken no Jutsu Mediante un truco de camuflaje con el chakra muy básico, el usuario aplana el otro arma y la pega y esconde en la sombra sobre el suelo de la primera. Cuando el oponente decide bloquear el primer arma, el usuario puede sacar por sorpresa la segunda de la sombra de la primera, para sorprenderle y atacar sus piernas o su bajo torso.
¤ Katon: Ryūka no Jutsu ¤ Elemento Fuego: Técnica de Fuego del Dragón - Tipo: Ofensivo - Rango: C - Requisitos: Katon 30, enemigo inmovilizado con cables, parcial o totalmente - Gastos: 36 CK - Daños: 60 PV - Efectos adicionales: Quemaduras de 5 PV por turno hasta que sean tratadas o tras 3 turnos - Sellos: Serpiente → Dragón → Liebre → Tigre - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones: La explosión generada por la técnica abarca tres metros alrededor del oponente
Tras constreñir el movimiento del enemigo utilizando cables de la manera que el ejecutor prefiera, es esencial que el susodicho mantenga en su boca el extremo de ese mismo hilo. Tras realizar los sellos correspondientes, una llamativa columna de fuego se genera y alza frente al ninja, acto seguido estas llamas circulan a toda velocidad hacia el objetivo, utilizando el cable como puente conductor. El Ryūka no Jutsu es la técnica Katon más brutal entre las de bajo rango, ingeniada para marcar a un solo objetivo y causarle todo el daño posible aprovechando que este, supuestamente, no puede evitarlo. La carrera de la llama es tan brutal y concentrada, que destrozará cualquier obstáculo del escenario que haya en su camino, y causará graves quemaduras a aquellos que sean capaces de soportarla.
Shuriken: 12 PV/impacto directo (x2)
Katon: Ryūka no Jutsu: 60 PV + 5 PV durante 3 turnos
Estaba totalmente inmerso en mi jugada, que pensé que había sido bastante buena, y lo fue. Al menos conseguí hacerle un buen corte en la pierna. Entonces sentí algo que se enrollaba y despues fuego y para cuando el dolor cesó, o al menos se mitigó, estaba tirado en el suelo mirando al cielo.
Aquel loco había intentado calcinarme vivo, tenía quemaduras con más grados de los que tenía yo en estudios. Miraba las nubes y las nubes me miraban a mi, y me encontré con lo que había estado evitando mirar desde que Gouna-sama me ordenó volver al ring. Mis ganas de levantarme eran nulas. Mis ganas de pelear eran nulas. No había planes ni estrategias, elucubraciones complicadas para sorprender a mi enemigo. Solo encontraba ganas de insultar a todos los que hubieran estado involucrados en aquel estúpido combate que me llevaba de nuevo a herir a un compañero.
Estaba cansado, literal y metaforicamente. Físicamente por el Shunshin y el abrasamiento y mentalmente por la poca inteligencia y empatía que parecían mostrar los que deberían ser mis compañeros. Solo les importaba su enorme y poderoso miembro viril y la enorme satisfacción de mostrarlo en público. ¡Yo estoy intentando que salgamos todos vivos!
—Creo que es suficiente, Nabi-san —
Esbocé una sonrisa. Lo era, más que suficiente. Me doblé, sentandome, despues apoyé una mano en el suelo estabilizandome.
— Siento decepcionarte, Akame-san. Pero yo no me mantengo entre los límites de este circulo en busca de llenar una marmita. Yo ya tuve suficiente, en el combate anterior se me ordenó combatir, indirectamente se me prohibió rendirme. Supongo que...
Tras apoyar un pie me impulsé con mis manos en mi propia rodilla, poniendome de pie de nuevo, tambaleante e intentando recobrar el equilibrio y la sensación de tener la cabeza sobre los hombros.
— Supongo que eso es lo que me separa de vosotros. Llamalo sentido del deber o conciencia. Seguiré a mi kage y a Uzushiogakure a donde me lleven, pero yo soy shinobi para proteger a mis gentes y eso nos incluye a ti y a mi. Si estoy de pie y sigo peleando no es por ti ni por mi, es porque Gouna-sama me ha ordenado luchar. Lucharé y si gano sera con el menor daño posible infligido, y si pierdo, será porque no puedo levantarme.
Hice una breve sucesión de sellos y ante mi se levantó un enorme muro de Doton con el simbolo de Uzushiogakure ocupando casi toda la extensión del mismo. Al alzarse de la tierra bajo la madera todo el ring se desestabilizó durante unos instantes para acabar finalmente partiendose en dos dejando un vacio entre ambas partes entre las cuales se ergía el muro.
Aún me preguntaba hasta qué punto era legal partir esa mierda de madera que parecía hecha a proposito para fastidiar a los pobres Dotoneros.
Estado de Nabi
66/150
– -
84
–
84/130
– -
32
–
1 AO
—Inventario:
- Hitai-ate [Cuello]
- Portaobjetos basico (9/10) [En el lado izquierdo del abdomen]
Bomba de luz
Bomba sonora
5 shuriken
Bomba de humo
Hilo shinobi
- Kodachi [Perdida por ahí]
- Mecanismo oculto de kunai [muñeca izquierda]
Kunai
¤ Doton: Doryūheki ¤ Elemento Tierra: Muro de Estilo Tierra - Tipo: Defensa - Rango: B - Requisitos: Doton 20 - Gastos:
16 CK
(Doton 40) (multiplicable x2)
(Doton 60) (multiplicable x3)
(Doton 80) (multiplicable x4)
(Doton 100) (multiplicable x5)
- Daños: - - Efectos adicionales: Defiende 40 PV - Sellos: Tigre → Liebre → Jabalí → Perro - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: La barrera mide 2 metros de ancho y 3 de alto (aumenta con la multiplicación)
El usuario crea una pared sólida de tierra como forma de defensa. El ejecutor de la técnica puede convertir su chakra en tierra dentro del cuerpo y escupirlo para formar la barrera, o manipular la tierra frente a él con el mismo objetivo. Entonces, la tierra se levanta y se endurece de forma casi instantánea, protegiéndolo. Dadas las propiedades especiales de la tierra, la pared es altamente resistente al agua, pero es débil a ataques de elemento rayo. Los usuarios pueden personalizar la apariencia de la barrera, a efectos totalmente interpretativos.
18/08/2017, 15:12 (Última modificación: 18/08/2017, 15:15 por Uchiha Akame.)
El Uchiha no pudo evitar que una amplia sonrisa se distinguiese en su cara. «Nabi-san, finalmente tú y yo no somos tan distintos...» Las palabras de su compañero de Villa le llenaron de orgullo y sincero respeto; pese a que el Senju era un chico un tanto extraño y de ideas más extrañas aún, estaba peleando hasta su último aliento cumpliendo las órdenes de su Kage. «¿Acaso hay mejor motivo para luchar? Este muchacho entiende el verdadero significado de ser un ninja».
—Es un orgullo luchar contra ti —respondió Akame, lacónico pero sincero.
El siguiente asalto no se demoró, y en esta ocasión le tocó al Senju ejercer la iniciativa. Sus manos se entrelazaron en unos sellos que el Sharingan de Akame analizó y memorizó sin dificultad; al instante, un gigantesco muro de aspecto muy sólido se alzó entre ambos, rompiendo el tatami con su fuerza. «Gracias por este regalo, Nabi-san. Lo usaré sabiamente», pensó el Uchiha.
No tenía tiempo que perder. Su rival estaba ahora oculto tras la barrera de tierra y a saber qué clase de estrategia podría andar preparando. Akame sacó una píldora de su portaobjetos y se la llevó a la boca mientras corría hacia el muro; luego juntó las manos e hizo una corta serie de sellos.
Dos Akames rodearían el muro a todo correr, uno por el lado izquierdo y otro por el lado derecho. Los dos tenían el rojo Sharingan de tres aspas en los ojos, y observaban atentos buscando la posición de su rival.
Estado de Akame
PV:
152/170
–
CK:
159/180
–
+35
–
Inventario
Hitai-ate de Uzushiogakure [en la frente]
Mecanismo oculto de kunai (x1 kunai) [en la muñeca derecha]
20/08/2017, 23:43 (Última modificación: 20/08/2017, 23:43 por Inuzuka Nabi.)
El Uchiha no recibiría contestación alguna por mi parte, ni eso ni ningún tipo de visión de mi sensual cuerpo a ninguno de los dos lados del muro. El público seguramente empezase a pensar que si era un cobarde por desaparecer cada dos por tres o cosas así. Lo que esa gente no entendía es que el principio más básico de los ninja era no ser descubierto, atacar desde las sombras y esas cosas.
La mayor parte de los participantes de aquel estúpido torneo parecían haberlo olvidado, como si los kages se llamasen así por la sombra que les hacen sus sombreros o algo. Yo por mi parte esperaría pacientemente en mi escondite hasta que tuviese una oportunidad.
Estado de Nabi
61/150
– -
5
–
84/130
– - –
1 AO mantenida
—Inventario:
- Hitai-ate [Cuello]
- Portaobjetos basico (9/10) [En el lado izquierdo del abdomen]
Bomba de luz
Bomba sonora
5 shuriken
Bomba de humo
Hilo shinobi
- Kodachi [Perdida por ahí]
- Mecanismo oculto de kunai [muñeca izquierda]
Los dos Akames alzaron una ceja, escépticos, cuando tras rodear el muro —cada uno por un flanco— y buscar con la mirada a su oponente, se encontraron con que había desaparecido. Revisaron todo el escenario; el propio muro, el suelo, el resto del tatami. Pero no había rastro alguno.
Ambos Uchiha desenvainaron sus espadas, idénticas como ellos mismos, y empezaron a peinar el área otra vez. Sus ojos, rojos por el Sharingan, recorrían cada centímetro de la arena de combate en busca de cualquier indicio sobre el paradero de su oponente. Caminaban en círculos, uno por el lado izquierdo y otro por el derecho, con los ninjatō en ristre y las rodillas ligeramente flexionadas.
Estado de Akame
PV:
152/170
–
CK:
169/180
–
+10
–
Inventario
Hitai-ate de Uzushiogakure [en la frente]
Mecanismo oculto de kunai (x1 kunai) [en la muñeca derecha]
Gracias a mi técnica subterranea sabía exactamente donde estaba Akame y sabía hacia donde se movía, suponiendo que fuese mirando hacia delante como una persona normal solo me faltaba que su espalda y un sitio donde no hubiera tatami coincidiesen, cuando lo hicieron salí, justo a un lado del muro y sin malgastar ni un segundo saqué cuatro shuriken de mi portaobjetos.
Nos separaban poco más de cinco metros cuando le lancé dos shurikens con cada mano, tras lanzarlos me prepararía para cualquier contraataque que pudiese lanzarme.
Estado de Nabi
56/150
– -
5
–
78/130
– +
10
–
1 AO desvelada: Moguragakure no jutsu
—Inventario:
- Hitai-ate [Cuello]
- Portaobjetos basico (9/10) [En el lado izquierdo del abdomen]
Bomba de luz
Bomba sonora
5 shuriken -4
Bomba de humo
Hilo shinobi
- Kodachi [Perdida por ahí]
- Mecanismo oculto de kunai [muñeca izquierda]
Kunai
¤ Doton: Moguragakure no Jutsu ¤ Elemento Tierra: Técnica del Escondite del Topo - Tipo: Apoyo - Rango: C - Requisitos: Doton 30 - Gastos: 26 CK (divide regeneración del chakra) - Daños: - - Efectos adicionales: Permite el escondite y la total movilidad bajo tierra en un amplio radio - Sellos: Perro - Velocidad: Moderada - Alcance y dimensiones: El usuario puede moverse en un rango de 10 metros a la redonda.
Esta técnica convierte la técnica en arena muy fina canalizando chakra a través de ella, permitiendo al usuario introducirse como un topo en el subsuelo, y moverse a través de él. El usuario puede saber exactamente donde se encuentra, él y sus adversarios, a pesar de encontrarse bajo tierra, mediante la medición de fuerzas magnéticas. El usuario puede salir por sorpresa de la tierra (aunque no a una velocidad muy elevada) para atacar a sus oponentes. También puede cavar de forma profunda para esconderse de sus enemigos y dar la sensación de que ha escapado del campo de batalla. Después de excavar o de surgir de la superficie, la tierra vuelve a su estado original, por lo que esta treta no deja rastros de las acciones del ejecutor.
De repente, uno de los Akame vio que algo se movía entre los escombros, junto al muro. Se acercó con paso cauto, empuñando su espada con la mano zurda. Para su sorpresa, de la tierra emergió Nabi, con los ojos fijos en el otro Akame —que en ese momento se encontraba peinando el área contraria del tatami—. El Senju salió del suelo como una florecilla en Primavera, empuñando un par de shuriken en cada mano que arrojó sin piedad al Akame sobre el que se había fijado.
Sin embargo, el otro no pensaba quedarse parado. Había lanzado su kunai oculto por los aires, hacia su rival, nada más verlo emergiendo a la superficie. El cuchillo voló raudo hasta estar a un par de metros sobre la cabeza del Senju antes de desaparecer con un "puf" y una nube de humo. En su lugar se pudo ver al auténtico Akame, con el sello del Carnero formado en su mano zurda y un shuriken en la diestra.
«¡Te tengo!»
Al mismo tiempo que Nabi arrojaba sus shuriken a uno de los clones del Uchiha —que recibió los cuatro impactos para luego deshacerse en una voluta de humo gris—, el verdadero Akame expulsó dos saetas ígneas que volaron raudas hacia Nabi. Una de ellas llevaba también oculto un shuriken, y ambas buscaron alcanzar al rubio en su cuerpo ya maltrecho. «Espero haber calculado bien...»
Tras ejecutar su Katon, Akame aterrizó a unos cuatro metros de su oponente, flexionando ambas rodillas para amortiguar la caída.
Estado de Akame
PV:
152/170
–
CK:
117/180
–
-28
– (hace 2 turnos)
-24
–
Inventario
Hitai-ate de Uzushiogakure [en la frente]
Mecanismo oculto de kunai (x1 kunai) [en la muñeca derecha]
Portaobjetos básico [en la cadera derecha]
Hilo shinobi (x1, 1 uso)
Shuriken (x2)
Hikaridama (x1)
Píldora de soldado básica (x0)
Antídoto (x1)
Ninjatō [a la espalda]
San Tomoe no Sharingan activado
x2 Acciones Ocultas reveladas: crear dos Bunshin (con alterador) y usar el Henge para camuflarse como el kunai del que iba por la derecha
Un Ninjutsu que crea una copia intangible del cuerpo del usuario, sin ningún tipo de sustancia ni solidez. Puesto que el clon, por sí mismo, no tiene la habilidad de atacar, y sólo puede utilizarse pues para confundir al enemigo, normalmente empleado en combinación con otro tipo de Ninjutsu o tácticas. Es una técnica muy básica, pero con ingenio puede utilizarse de forma efectiva. Los clones se disipan cuando entran en contacto con cualquier cosa. Pueden ser fácilmente diferenciados de una persona por usuarios de Dōjutsu. Un usuario con ojos normales puede también distinguir los clones del original, puesto que éstos no tienen sombra y no causarán perturbaciones en el área que les rodea (no levantarán polvo, aplastarán la hierba, etc).
Alterador (Busshitsu): Inyectando y moldeando más chakra en un clon ilusorio (10 CK, divide regen. de chakra), el usuario es capaz de dotarle de una mínima cantidad de sustancia física. Los bunshin así mejorados serán clones sólidos a todos los efectos (10 PV de resistencia), pero sus armas no causarán daño y no podrán usar técnicas del usuario ni transmitir información al disiparse. Pueden ser diferenciados de una persona normal por usuarios de Dōjutsu. Los clones pueden crearse a una distancia máxima de 5 metros, y no pueden alejarse más de 20 metros del usuario.
Dado que muchas de las misiones ninja están basadas en la infiltración, este Ninjutsu no tiene precio. Se usa normalmente para transformarse en personas ajenas, pero también puede utilizarse para transformarse en animales, plantas e incluso objetos inanimados como armas. Esto le da a la técnica una gran abundancia de usos. La transformación de un ninja habilidoso (Ninjutsu 60) será exactamente como el artículo original, así que será imposible diferenciarlos. Es uno de los Ninjutsu más básicos, y es incluso enseñado en muchas de las academias shinobi del mundo; sin embargo, está considerada por encontrarse entre las técnicas más difíciles de su rango, pues requiere emisión constante de chakra para mantener la forma elegida. Además, el usuario puede estar en todo momento interactuando con el entorno. Los ninja con poca experiencia sufren de estrés mental por ello, así que la mejor forma de determinar si el usuario está utilizando la técnica es causarle este mismo estrés (causarle daño o derribarlo eliminará la transformación).
¤ Katon: Hōsenka Tsumabeni ¤ Elemento Fuego: Carmesí de Uñas Florales del Sabio Fénix - Tipo: Ofensivo - Rango: A - Requisitos: Katon 50, 1 shuriken por esfera - Gastos: 12 CK por esfera - Daños: 20 PV por esfera + daño del shuriken - Efectos adicionales: - - Sellos: Carnero (una mano) - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: Las bolas de fuego gozan de medio metro de diámetro, aproximadamente, y alcanzan los 12 metros de distancia antes de disiparse
Versión revisada y mejorada del Hōsenka no Jutsu, que mantiene sus virtudes, abocándolas hacia una postura mucho más ofensiva que la técnica original. Al igual que ocurría con la susodicha, las saetas de fuego son caóticas y extremadamente rápidas, controladas con chakra, por si fuera poco, para hacerle al oponente la evasión lo más inalcanzable posible. Sin embargo, en esta ocasión, los proyectiles son mucho más potentes, transformando además a los Shurikens en una necesidad a la hora de reforzar al máximo la potencia de las esferas. A diferencia de la técnica original, los Shurikens son visibles, potenciados por el chakra, por lo que estos proyectiles cortan, queman y destrozan por donde pasan. El fuego continúa ardiendo sin importar lo poco inflamable que sea el objeto contra el que impacte el proyectil, alimentado por el chakra.
Primer proyectil: 20 PV + 12 PV por shuriken
Segundo proyectil: 20 PV
Como no especificaste a por cuál de los dos Akames ibas, lo tomé como que te fijaste en el que estaba a la izquierda. Tampoco entendí muy bien la parte de "esperé hasta que su espalda y un sitio donde no hubiera tatami coincidiesen", pero creo que no es muy relevante de todos modos dado que el otro clon podía verte en cualquier caso.
No entendía qué estaba pasando, con mi técnica debería haber diferenciado a Akame de un clon, pero de alguna forma había hecho clones reales capaces de engañar en todos los aspectos. Tenía una fuerza y un poder superiores a los de cualquier Genin y los usaba de forma más que abusiva contra un compañero de villa, yo podría haber hecho una técnica contra él cuando salí, pero yo no soy como ellos.
Como Kotetsu, como Akame, que parecen tirar a un lado todo compañerismo en el mismo momento en que tienen delante un "rival". Cuando volví a sentir un jutsu igneo por la espalda decidí que había tenido suficiente, no iba a seguir en su juego. Estaba cansado de ellos y de tener que estar haciendo algo para lo que no estaba preparado.
Traicionar mis ideales por el espectaculo igual que lo hacían ellos. Me quedé en el suelo tirado sin abrir los ojos ni moverme, con la espalda llena de quemaduras al igual que la marcas que ya coleccionaba del anterior jutsu con el que casi me quema vivo. Sin importarle ni el tiempo que pueda tardar en recuperar ni si me recuperaría, solo para inflar su ego.
Sabía cómo pensaba y lo que me diría si le exponía este hecho. "Es parte de la vida de un shinobi" o "No haberte apuntado a un torneo si no estabas preparado para apuñalar por la espalda a tus propios compañeros" Saber su ideologia solo me hacía enfurecerme más.
Pero no hice nada, ni siquiera hice el asomo de estar consciente. Ni un movimiento ni un resoplido ni nada. Ahí se acababa el combate, toda mi vida preocupandome de los kuseños y los amenios y tenía al enemigo justo al lado. En mi propia generacion.
Cuando las saetas ígneas alcanzaron a Nabi, el muchacho cayó derribado en el acto junto al muro de Doton creado por su propia técnica. Akame aterrizó a una distancia prudencial mientras el clon que todavía mantenía estable se acercaba por el flanco contrario, enarbolando su espada ilusoria.
«¿Se terminó?»
El Uchiha se acercó, cauto primero y más confiado despues, hasta el cuerpo inmóvil de su compañero de Aldea. Estaba abrasado y sus ropas dejaban ver quemaduras bastante serias que probablemente tardarían unos días en sanar. Akame esperó un tiempo prudencial y, cuando se cercioró de que aquel chico estaba totalmente rendido, se irguió hacia el palco de los Kage.
Su clon se deshizo en una voluta de humo gris mientras él dirigía una mirada hacia Uzumaki Gouna, su Kage. Ella representaba a todo Uzushiogakure. Le hizo una reverencia, y luego salió de la arena.