Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
Como un libro abierto y con letras en negrita y mayúsculas, Shukaku leyó el sello de Marrow gracias al Sharingan: Carnero, Shunshin. El General de Kurama iba a atacarle con todo lo que tenía, y él se defendería con todo lo que le quedaba. Existía una razón por la que no había desactivado el Sharingan. O más bien dos. La primera, porque ser capaz de predecir los movimientos del enemigo valía el sacrificio del desgaste que ello conllevaba. Incluso cuando andaba tan escaso de energía. La segunda… Bueno, la segunda era porque era su mejor defensa.
Marrow apareció a su lado en un letal parpadeo, como el que provocaría el relámpago antes de caer. Los huesos del Kaguya viajaron en su dirección, afilados y contundentes. Había escuchado cosas de aquel clan, a través de Datsue. Cosas sobre su conducta que le hacían torcer la boca en una sonrisa aprobatoria. Sin embargo, decían que sus huesos no tenían rival, que llegaban a ser más resistentes que el acero. Y ahí... se equivocaban.
Si algo había aprendido del mundo ninja en los últimos años, es que aquellos malditos ojos rojos no tenían parangón. Las costillas de Susano’o se materializaron justo a tiempo para repeler el golpe, hueso divino contra hueso mortal, con la sangre brotando del Mangekyō de Shukaku. Su rostro se torció en un gesto enfurecido.
—Te doy la oportunidad de rematarme… ¿y así respondes? ¡¿Con un ataque tan flojo?! —le espetó, fuera de sí.
Creía que ya no contaba con ninguna posibilidad de ganar aquel combate, pero acababa de cambiar de parecer. Quizá tan solo le quedase una gota de chakra. Quizá no le daba ni para ejecutar un triste Bunshin. Pero por Rikudō, iba a luchar hasta el jodido final contra aquel desgraciado. Y si volvía a caer en el error de subestimarle simplemente porque no le quedaban dientes con los que morder, le haría pagar el precio de semejante osadía.
Empezó a retroceder con rápidos saltos, manteniendo la vista hacia Marrow, para tratar de llegar a tierra firme, donde se encontraba parte de su ejército inconsciente. ¿Le seguiría el General, o perseguiría a los pobres diablos que trataban de huir del barco? Pasase lo que pasase, Shukaku tenía claro su próximo movimiento: sería el mismo en ambos casos.
- PV:
2/3 golpes
–
- CK:
4/100
–
-32
–
- Susano'o
30/80
–
-50
–
- Daño propuesto:
- Acciones ocultas:
¤ Susano'o: Kyōkaku ¤ Tempestuoso Dios del Valor: Costillas - Tipo: Defensivo - Rango: S - Requisitos:Uchiha 85, ambos Mangekyō Sharingan - Gastos: 32 CK, +0'4X para regenerar una cantidad - Daños: - - Efectos adicionales: Defiende 80 PV, puede regenerarse X salud - Carga: 1 - Velocidad: Muy rápida (formación) - Alcance y dimensiones: -
Susano'o es la tercera y última habilidad concedida por el Mangekyō Sharingan a aquellos que han conseguido despertar las otras dos, en el ojo izquierdo y en el derecho. Esta técnica crea, por fases, un ente gigante y humanoide que rodea al usuario, y que se convierte en su deidad guardiana personal. Sin embargo, su uso prolongado consume la visión del Uchiha a velocidad elevada, y el gran coste de chakra que conlleva pone en peligro su vida.
Durante la primera fase del Susano'o, el usuario es capaz de materializar las costillas del ente, protegiéndose a sí mismo de los ataques de los demás. Las costillas no impiden que cualquier cosa pase a través de los huecos entre ellas, pero el Uchiha es capaz de moverlas hacia arriba o hacia abajo para bloquear a su gusto, y el aura de chakra en sí misma bloquea armas y protege sin puntos ciegos la retaguardia, sólo siendo realmente vulnerable el usuario en la apertura delantera, de la que puede estar mucho más pendiente. Una vez materializado el Susano'o, si el usuario lo desmaterializa pero no abandona el estado del Mangekyō, puede volver a materializarlo sin coste alguno y con la resistencia que le quedaba.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado
Grupo 0: Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 1: Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80
Grupo 2: Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 5: Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Vamos a agilizar las cosas. Desde esta ronda, habrá un límite de cinco días. Este límite no se aplica entre post y post, sino para completar la ronda. Es decir, yo volveré a postear como master al cabo de estos cinco días y si ha faltado alguien tendré libertad para interpretar qué ha pasado con su personaje. Tened cuidado porque podría acarrear graves consecuencias para vuestros personajes. Obviamente, si hay una ausencia justificada, esto no se aplicará.
Hayato lideró al grupo de prisioneros. Jun y Toshio le seguían de cerca, mientras que Ranko seguía apoyada en el shinobi de Uzushiogakure. Buscando llegar a tierra firme, el Senju decidió tomar una ruta en diagonal en un intento de sortear la atención del General. A mitad de camino, una idea cruzó su mente: intentó hacer que Ranko se sostuviera momentáneamente por sí misma y realizó una tanda de sellos. Tras esto, hasta cuatro Hayatos surgieron de sendas volutas de humo y echaron a correr hacia el barco. Sin embargo, la kunoichi a la que había estado sosteniendo hasta el momento debía de haber sufrido un fuerte trauma, tanto físico como psicológico, porque se había hundido sin remedio en el agua sin hacer nada por evitarlo.
- - - - - - - - - -
Los huesos de Marrow chocaron y chirriaron contra un muro. Frente a sus ojos, y entre él y su presa, se había materializado lo que parecía ser una caja torácica constituida por energía de color turquesa.
—Te doy la oportunidad de rematarme… ¿y así respondes? ¡¿Con un ataque tan flojo?! —le espetó el Shukaku, con sangre manando de su ojo izquierdo.
La respuesta de Marrow apenas se limitó a un leve fruncimiento del ceño. Pero cuando el Shukaku comenzó a retroceder con rápidas zancadas, el General apuntó con la palma de sus manos... no a él, sino al grupo de los cuatro prisioneros que aún se mantenían en el agua, una de ellos hundiéndose sin remedio. Los muy ingenuos habían intentado engañarle con un grupo de cuatro shinobi idénticos a uno de ellos que se dirigían sin siquiera levantar agua desde la suela de sus sandalias de vuelta al barco. ¿Acaso se creían que estaban lidiando con un genin recién salido de la academia?
—Estúpidos —espetó, justo en el momento en el que una bala de hueso surgía de la falange de uno de sus dedos. Pero con una única palmada ese pequeño huesecito aumentó súbitamente de tamaño hasta formar lo que parecía ser una auténtica bala de cañón de cinco metros de diámetro.
La cuestión era: ¿qué pasaría ahora? ¿El Shukaku se dignaría a salvar a sus shinobi? ¿O les dejaría defenderse de aquella nueva amenaza?
PV
270/270
– CK
102/200
–
+10 CK
–
-10 CK
–
-54 CK
– CK de Kurama:
59/200
–
Píldora de soldado superior ingerida: 40/50 CK regenerados
Agilidad 50 +12 =
62
–
¤ Teshi Sendan ¤ Diez Balas Excavadoras - Tipo: Ofensivo (cortante) - Rango: S - Requisitos:Kaguya 50 - Gastos: 6 CK por bala (máximo 10) - Daños: 10 PV por bala - Efectos adicionales: - - Carga: 3 - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: 10 metros
Una de las pocas técnicas que le permite al usuario atacar rápidamente desde grandes distancias.
Gracias a la habilidad del Shikotsumyaku, el usuario es capaz de disparar las falanges de la punta de sus dedos endurecidas. Al aplicar un movimiento de torsión, los proyectiles pueden llegar a perforar piel como lo haría cualquier otro arma. Dado que el usuario puede regenerar los huesos fácilmente, la habilidad puede volver a utilizarse en cortos lapsos de tiempo (1 turno mínimo).
¤ Teshi Ōdan ¤ Gran Bala Excavadora - Tipo: Ofensivo (contundente) - Rango: S - Requisitos:Kaguya 80 - Gastos: 54 CK - Daños: +90 PV a una bala de Teshi Sendan - Efectos adicionales:
Hace aumentar el alcance de una bala en hasta 50 metros
Esta técnica no podrá volver a ser utilizada en 4 turnos
- Sellos: Palmada - Velocidad: Instantánea - Alcance y dimensiones: La bala gigante abarca 5 metros de diámetro
Tras utilizar la técnica Teshi Sendan, el usuario es capaz de convertir una de las balas en un gigantesco proyectil capaz de aplastar a un oponente. El hueso se transforma tras el estallido de una nube de humo, y es capaz de golpear así a oponentes que habían esquivado el impacto inicial de una bala pequeña.
¤ Karamatsu no Mai ¤ Danza del Alerce - Tipo: Ofensivo (cortante) / Defensivo - Rango: S - Requisitos:Kaguya 40 - Gastos: 48 CK (divide regen. de chakra) - Daños:
Daño/Defensa de 50 PV al recibir un Taijutsu
50 PV por golpe
- Efectos adicionales: - - Carga: 3 - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo, las espículas miden 30 centímetros de largo.
La tercera de las cinco danzas del clan Kaguya.
El usuario hace crecer desde todo su cuerpo al unísono una gran cantidad de espículas óseas puntiagudas por todo su cuerpo. Cualquier ataque físico que se le intente hacer recibirá un potente contraataque que perforará y hará sangrar a la víctima. El hecho de que la técnica sea tan rápida, combinado con que la armadura ósea puede ser utilizada durante todo el tiempo necesario para atacar, además de defender, hace que el ejecutor sea prácticamente intocable a cortas distancias. Si un oponente se acerca demasiado, basta con girar rápidamente sobre sí mismo para alejarlo lleno de cortes.
Sin embargo, si el usuario recibe un golpe superior a 50 PV, la defensa se desbarata y debe pagar el coste energético si quiere mantener la técnica activa.
¤ Generosidad de Kurama
- Requisitos: Pertenencia a los Ocho Generales de Kurama
El usuario dispone de 200 CK adicionales manteniendo un vínculo directo y perpetuo con Kurama a través de un sello. Además, será capaz de activar hasta la primera capa (con una cola) y utilizar todas las técnicas disponibles para dicha forma. El usuario obtiene la habilidad de lanzar bijuudamas desde la palma de las manos o desde la boca, incluso si no tiene activada la capa de bijuu. Gracias al vínculo con Kurama, el bijuu puede poseer momentáneamente al usuario y controlarlo como desee (sólo podrá resistirse si su Voluntad supera los 100 puntos). Kurama puede disponer del chakra adicional otorgado por esta habilidad con libertad, y retirarlo si lo ve conveniente. En momentos puntuales, Kurama puede otorgar hasta 400 puntos de CK voluntariamente, añadiéndolos de sus propias reservas.
¤ Capa de Chakra (Versión 1) - Tipo: Apoyo, Ofensivo - Requisitos: Ninguno - Gastos: 21 CK por onda de chakra - Daños:
12 PV por quemadura
25 PV por coletazo
35 PV por onda de chakra
- Efectos adicionales:
El CK del bijuu accesible del usuario regenerará si no se usa chakra del bijuu
+12 a Fuerza, Resistencia, Aguante, Agilidad y Poder
Defensa de 10 PV
-10 PV/turno en caso de no controlar al bijū
- Velocidad: Muy rápida (onda de choque) - Alcance y dimensiones: -
La primera capa de chakra forma un denso velo de energía alrededor del jinchūriki. Esta capa, similar en apariencia a un líquido en ebullición, es burbujeante y de color rojo anaranjado y dota al jinchūriki de una cierta protección física. Los cambios físicos que son experimentados son más pronunciados que durante el Aspecto de Bijū, pero además se forman las orejas encima de su cabeza y de una hasta nueve colas tras el final de su espalda a partir de la capa de chakra y con las que son capaces de interactuar con el entorno.
Para los jinchūriki que no han aprendido a controlar a sus bijū, el chakra de la bestia tenderá a ser perjudicial: experimentará un proceso de corrosión en su propio cuerpo que finalmente podría terminar dañándolo con un uso prolongado. Esto también se aplica a aquellos que entren en contacto con ellos.
Esta capa de chakra suele adquirirse por un creciente estado de rabia, tensión, estrés o peligro, cuando el sello que contiene al bijū se debilita y en consecuencia deja al jinchūriki en un estado de menor control sobre su propio cuerpo con cada cola liberada. Aunque no se ha observado que los jinchūriki lleguen a perder por completo el control en este estado, sí es cierto que se vuelven más salvajes y agresivos.
En el caso del jinchuuriki del Kyuubi, si no ha controlado a su bijuu, normalmente este estado presenta de una a tres colas. La cuarta puede ir emergiendo poco a poco. Si llega a emerger por completo, alcanza lo que se conoce como Versión 2 y pierde el control.
Su caminata por el agua parecía ser bastante tranquila. Bastante tranquila con respecto a los restos del barco que flotaban por ahí, junto a, probablemente, cientos de cadáveres a sus alrededores y con los dos protagonistas del espectáculo bélico dándose hasta lo que no tienen.
Ella solo estaba mirando hacia delante, donde estaba su guía y Ranko, la cual no parecía estar del todo bien. Tan así que, de un momento para otro, parecía olvidar por completo su habilidad de caminar sobre el agua. De hecho, tan solo de caminar. Fue como que se desvaneció y empezó a caer en el agua sin remedio alguno.
—¡RANKO! — Gritó con fuerza en dirección a ella mientras no dudó en agacharse y extender su mano, esperando que esta reaccionase de algún modo y pueda agarrarse de ahí.
Tal como pensó, al darse vuelta y ver el combate, notó que Marrow ya les estaba mirando. Pensó que quizás era por su grito, pero a ella le parecía obvio que la estrategia del Senju había sido un poco estúpida. Le daba el crédito que por lo menos lo intentó. Aunque era evidente lo que estaba pasando.
El General, fiel a su propio ser, no tardó ni dudo en arremeter contra ellos, forzando a que Shukaku tenga que elegir entre proteger al grupo o seguir a la ofensiva. Una bola grande de hueso se dirigía directo a Ranko, la persona a la cual le estaba dando el brazo.
Desearía poder tener alguna técnica para frenar eso. Para colmo estaban en el medio del agua ¿Que tipo de kunoichi de Amegakure no sabía usar el suiton? Si, la mismísima Jun. Incluso si pudiera hacer sellos a dos manos, tampoco es que tenía las herramientas para hacer mucho más.
Si Ranko no llegaba a agarrarle la mano a tiempo o si hacía otra cosa, iba a tener que dar un salto hacia atrás para que el impacto no le pegue a ella de rebote.
En una milésima de segundo, lo supo: Marrow iba a atacar a los polluelos de Kusagakure y Uzushiogakure. Lo supo por la palma de su mano, que les apuntaba, y por cómo empezó a arremolinarse chakra en su cuerpo. Shukaku conocía una técnica que quizás podría desviar su ofensiva y salvarles del inminente peligro. Podía abandonar su plan inicial, y echarles una mano salvadora. Si tan solo se frenase, si tan solo dejase de retroceder, entonces…
Entonces…
«¡JAAAAJIAJIAJIAJIÁ!»
Pero no, ¡claro que no iba a frenarse! Ni siquiera dio un paso dubitativo. Shukaku no era el canguro de nadie, y aquellos eran ninjas formados. Su Hijo no tenía nada que echarle en cara a partir de aquel momento: ya se habían liberado, como Datsue había pedido, el resto era cosa de ellos. Lo único que a Shukaku le quedaba por hacer en aquellas tierras era una cosa.
Una sola cosa.
—Tendrás el honor de ayudar al Dios del Fūinjutsu… Hana —murmuró, al posarse sobre su cuerpo inconsciente. Le golpeó el pecho con la palma de la mano, colocándole una técnica de sellado que los humanos llamaban Chakura Kyūin.
Ahora sí, avanzó unos pasos hasta la orilla, y ejecutó una tanda de sellos mortíferos. A su frágil cuerpo humano no le quedaba chakra suficiente ni para invocar una voluta de humo, pero no usaría el suyo, sino el de Hana. Se lo robaría, como hacía Datsue en sus mejores tiempos con los bolsillos de los primos. Sus pulmones se llenaron de un fuego incandescente, y lo expulsó por la boca en forma de una pequeña bola que trazó una parábola en el cielo en dirección a Marrow.
En cuanto impactase contra él o el mar, estallaría en una tormenta de llamas que calcinaría todo lo que había a su alrededor.
—¡Subamos el nivel, Marrow! ¡JAAAAAJIAJIAJIAJIAJIÁ!
- PV:
2/3 golpes
–
- CK:
4/100
–
- CK de Hana:
130/250
–
-120
–
- Susano'o:
30/80
–
-50
–
- Daño propuesto:
- Acciones ocultas:
¤ Chakura Kyūin ¤ Sello de Absorción de Chakra - Tipo: Apoyo - Rango: C - Requisitos:Fūinjutsu 35 - Gastos: (divide regeneración del chakra propio) - Daños: - - Efectos adicionales: Adquiere capacidad de absorción del chakra de un adversario inconsciente y sobre el sello - Carga: 5 - Velocidad: Instantánea - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo, el sello mide 50 cm, es posible absorber chakra siempre que el objetivo se encuentre a menos de 10 metros
El usuario utiliza complicadas fórmulas de sellado, que aparecen en la palma de su mano, y la choca contra el estómago de un oponente inconsciente (que no dormido o inmobilizado) que esté boca arriba. En el suelo se dibuja un sello que estará vinculado directamente al usuario, y que absorberá chakra de la víctima para otorgárselo a él siempre que lo desee (únicamente para ejecutar otras técnicas) y se encuentre a menos del alcance máximo de la técnica. Una vez que el oponente haya sido afectado por la técnica, no despertará hasta que no sea desactivada, o hasta que sea movido fuera del sello.
El dragón mide 6 metros de ancho y de alto, y recorre 15 metros antes de disiparse
La esfera abarca 1'5 metros de diámetro, y avanza 30 metros antes de disiparse. De impactar con algo, estalla en una explosión de 8 metros a la redonda
Técnica creada y mejorada por Datsue a lo largo del tiempo. Tras acumular chakra en el estómago y transformarlo en llamas, las moldea al exhalarlas para que tomen la apariencia de un dragón. El dragón avanza en línea recta hacia el objetivo, y de no impactar con él, puede girar la cabeza en cualquier dirección y abrir la boca, disparando una esfera flamígera.
El verdadero peligro de esta técnica radica en la esfera lanzada, que al entrar en contacto con algo, estalla, provocando una gran tormenta de llamas a su alrededor. Si la técnica es potenciada por un Fūton, tanto la esfera como la tormenta en llamas aumentan en un 50% sus dimensiones (además del aumento en daño que le corresponda).
Datsue puede, si quiere, lanzar directamente la esfera flamígera, en cuyo caso puede trazar parábolas realmente complicadas, e incluso lanzarla hacia arriba con la intención de que aterrice en un punto al caer.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado
Grupo 0: Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 1: Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80
Grupo 2: Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 5: Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Toshio siguió a Hayato de cerca junto al resto, quedándose justo detrás para poder ver sus alrededores y fijarse en cualquier peligro. El camino que tomaban era arriesgado, pero era el único que tenían. No podía evitar mirar el combate entre el Uzukage con asombro y preocupación ¿y cómo no iba a hacerlo? Cualquier técnica perdida podría hacerlo desaparecer en un solo instante.
Tan atento estaba en mirar sus alrededores, que no pudo hacer nada para evitar que Ranko se hundiese en el agua. A punto estuvo de agacharse para ayudarla a levantarse junto a Jun, pero justo entonces pudo ver una enorme bala de hueso dirigiéndose hacia ellos a toda velocidad.
— ¡La ostia!
Tenía muy poco tiempo para hacer algo y, aunque probablemente podría haber intentado apartarse de un salto, Jun y Ranko no tenían esa opción.
— ¡Joder!
Yendo completamente en contra de su primer instinto, Plantó ambos pies lo mejor que pudo en el agua y entrelazó ambas manos en una serie de sellos. «Rata, Caballo, Tigre». Del barco, cinco trozos de madera empezaron a ser arrancados por sí solos, antes de ser presurizados y afilados.
Los trozos de madera salieron todos disparados, evitando al grupo de supervivientes y Hayato, y dirigiéndose directos contra el enorme proyectil de hueso (60 PV). Sabía que eso no sería suficiente, pero era todo lo que podía dar en el momento.
— ¡Que alguien termine el trabajo! —Gritó, mientras volvía a ejecutar la misma cadena de sellos dos segundos más tarde.
Esta vez, solo tres trozos de madera saldrían disparados hacia Marrow (12 PV impacto, 8 PV corte), como tres Shuriken al vuelo, los proyectiles viajaron formando un pequeño abanico. Uno de ellos viajaría directo hacia el pecho de Marrow, mientras que los otros dos acabarían un metro más hacia la izquierda y a la derecha, respectivamente. Odiaba atraer atención hacia sí mismo, pero si podía dificultarle al muy maldito esquivar la técnica del Uzukage, haría lo que hiciese falta para conseguirlo, aunque eso significase quedar completamente exhausto.
Se llevó la mano al pecho, para respirar y tapar su herida, mientras sus piernas empezaban a hundirse. Estaba tan cansado que apenas podía mantenerse a flote, pero todavía podía mantenerse a duras penas.
- Daños: 8 PV/corte de proyectil, 12 PV/impacto de proyectil - Efectos adicionales: - - Sellos: Rata → Caballo → Tigre - Velocidad: Rápida (formación), Muy rápida (movimiento) - Alcance y dimensiones: 3 metros a los alrededores del usuario
El usuario utiliza cualquier material sólido a su alrededor (tejas de un edificio, la roca o la tierra, árboles, cemento o incluso arena) para hacer levitar varios bloques de prismas que presuriza con la ayuda de su chakra mientras formula sellos, haciéndolos más sólidos y afilados que el mismísimo acero. Inmediatamente después de que los termine, salen disparados hacia el oponente para cortarle y atravesarle como si auténticos shuriken se tratasen.
Por un instante, Siete pensó que la estrategia era sublime. Clonación e imitar al grupo corriendo, con tal de tener otro señuelo. Al final el general contra el que peleaba el Uzukage tendría tantos blancos a batir, que tendrían alguna posibilidad de escapar airosos. O eso pensó el buen Senju, optimista a más no poder.
La realidad fue bien distinta.
No solo no sirvieron los clones, si no que llamaron más la atención del general. Aunque quizás solo fue cosa del alejamiento del Uzukage, evitando el combate cuerpo a cuerpo con ese shinobi que parecía un costurero de astillas óseas. No podían culparlo, combatir cuerpo a cuerpo contra eso debía ser difícil de sobrellevar...
El general amenazó al Uzukage, señalando al grupo. Y en apenas unos segundos, lanzó algo ligero y fino. Éste lanzamiento incrementó dramáticamente de tamaño conforme avanzó, con la ayuda de un sello de mano. Una enorme bola de hueso, de casi 5 metros de ancho, avanzaba hacia los genins. Para más inri, Ranko pareció desvanecerse, e incluso empezó a hundirse.
«Mierda, mierda, mierda...»
Todo se estaba yendo a la puta. Y ese ataque no parecía precisamente débil, a pesar de la distancia que los separaba parecía perfectamente capaz de arrasar con todos ellos de un solo golpe. Se notaba en la determinación de la mirada del general.
Casi a la par que Toshio realizaba los sellos, Siete apuntó con su diestra hacia la bola de hueso. Una esfera incandescente se formó casi a la punta de su índice, en lo que formaba con su mano una especie de pistola. Toshio lanzó una serie de tejas y restos del barco hacia la bala ósea, y apenas hubo pedido ayuda, un disparo cruzó el trecho hasta la misma. La esfera de fuego concentrado de Siete sería la que impactaría en último lugar contra el enorme proyectil. Pero no por salir la última sería la menos poderosa (60 PV).
Conforme trataron la amenaza, y viendo que el Usukage volvía a acometer contra el general con un violento ataque, Hayato trataría de tomar a Ranko de nuevo para arrastrar de ella junto a Jun. Lo primordial era sobrevivir. Todos.
Conforme estuviesen, saldrían de nuevo corriendo hacia la orilla. Evidentemente, tratando de mantener toda la distancia posible con el enemigo. Una vez en tierra, tendrían mas oportunidades de huir de allí.
- Daños: 20 PV - Efectos adicionales: - Carga: 3 (+1 carga por multiplicable) - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: 10 metros
El usuario de la técnica posiciona la mano simulando una pistola, y concentra elemento fuego en la punta del dedo índice para crear una pequeña esfera de fuego de apenas 3 cm. Ésta esfera saldrá disparada a toda velocidad en linea recta, estallando contra lo primero que impacte o deshaciéndose tras recorrer 10 metros. La esfera deja tras de sí una pequeña estela de la llamarada que dura apenas unas decimas de segundo.
Alterador (Tamotsu): En ésta versión modificada de la técnica, el ejecutor de la misma mantiene la esfera de fuego en la punta del dedo, hasta perder la concentración o bien deshacer la técnica. Puede ser utilizada para iniciar un fuego, encender un cigarro, o para escribir un mensaje con un quemado sobre alguna superficie. Para realizarla, el coste es menor (6 CK), y mientras que la técnica siga activa no se regenerará CK.
Ranko flaqueó la energía le falló, y el chakra concentrado en sus pies se desvaneció. Ella se hundió un poco, y sólo contuvo la respiración por reflejo. El agua le escocía, pero le acobijaba extrañamente, dándole la bienvenida al abismo.
Sintió la mano de Jun y se apoyó en ella mientras concentraba chakra de nuevo. Apenas salió y tomó una bocanada de aire, vio la enorme bala que se acercaba. Tan rápido como pudo, Ranko alzó ambas piernas y las apoyó en Jun, luego le impulsó tanto como pudiesen sus miembros adoloridos. Su objetivo era lanzarla lejos de la trayectoria de la bala, mientras la Kusajin se hundía una vez más, también saliendo del ataque, o al menos eso esperaba.
Intentando hacer que su energía le rindiese al máximo, Ranko nadaría hacia sus compañeros, y emergería varios metros más adelante.
—¡L-lo siento! Perdí... Perdí la fuerza un momento...
Marrow y el Uzukage peleaban a un nivel que Ranko no podría alcanzar en su estado. Apretó los dientes y siguió. No intentaría atacar a Marrow, pues no tenía más que una herramienta en su arsenal, y era mejor no usarla. Aún.
Viendo a su compañera hundirse sin remedio en el agua, Jun le extendió una mano antes de que fuera demasiado tarde. Pero los prisioneros tenían otro problema más del que preocuparse: la bala de hueso gigantesca se dirigía hacia ellos sin remedio. Toshio utilizó una de sus técnicas para tomar el control de varios escombros del barco semihundido y lanzarlos con fuerza contra el proyectil. Acudiendo a la ayuda de su compañero, Hayato lanzó una bola incandescente que terminó por reducir a cenizas el ataque del General.
Mientras tanto, Shukaku había llegado a su destino buscando la seguridad de la costa. Rápidamente, buscó con sus ojos una fuente de la que alimentarse. Y aún tardó unos valiosos minutos en encontrarla entre aquella marabunta de cuerpos y cadáveres apilados por doquier: el inconsciente cuerpo de Hana, que seguía viva a duras penas. Pese a su lamentable estado, el bijū no dudó un instante en utilizar su maltrecho cuerpo como fuente de chakra gracias a uno de sus curiosos Füinjutsu. Y utilizó ese chakra para lanzar una bola de fuego hacia Marrow mientras que Toshio lanzaba más escombros contra él para dificultar su esquive.
Marrow se limitó a chasquear la lengua, con fastidio contenido y entonces los ataques cayeron sobre él en una marabunta de fuego, humo y escombros que salpicaron en el mar de forma ruidosa...
Pero entonces Shukaku sentiría algo detrás de él. Marrow estaba allí, tras el intercambio por uno de los muchos cuerpos que se agolpaban en la costa, y alargaba la mano hacia él a toda velocidad. Su intención era simple: Agarrara lo que agarrara, Marrow inyectaría chakra a través de sus manos y se encargaría de romper todos los huesos que se encontrara en su camino.
Era un movimiento a la desesperada. Probablemente un movimiento de lo más arriesgado. Pero había llegado la hora de apostar por el todo o el nada.
Y Marrow no estaba dispuesto a aceptar el nada.
PV
270/270
– CK
16/200
–
+10 CK
–
-96 CK
– CK de Kurama:
29/200
–
-30 CK
–
Píldora de soldado superior ingerida: 50/50 CK regenerados
Agilidad 50 +12 =
62
–
¤ Kawarimi no Jutsu ¤ Técnica del Reemplazo de Cuerpos - Tipo: Apoyo - Rango: E - Requisitos:Ninjutsu 25 - Gastos:
11 CK
30 CK (reemplazo por un clon o adversario)
- Daños: - - Efectos adicionales:
Esta técnica no podrá volver a ser utilizada en 8 turnos
(Aguante 80) Esta técnica no podrá volver a ser utilizada en 5 turnos
(Ninjutsu 60) El usuario puede añadir un sólo sello adhesivo al reemplazo, o dejar clavada un arma con un sólo objeto atado con un hilo (una vez por combate)
(Ninjutsu 80), (Destreza 60), (Fuerza 60) El usuario es capaz de reemplazarse por uno de sus clones (una vez por combate)
(Ninjutsu 100), (Destreza 60), (Fuerza 60) Si el usuario tiene más de 40 puntos en Fuerza que el oponente, puede utilizarlo (o a un clon de éste) como reemplazo (una vez por combate)
- Sellos:
Carnero → Jabalí → Buey → Perro → Serpiente
(Ninjutsu 60) Carnero
(Ninjutsu 80) Carnero (una mano)
- Velocidad: Instantánea
Con esta técnica, el usuario reemplaza su propio cuerpo con cualquier otro objeto del área, generalmente con un bloque de madera o una roca, en el momento en el que un ataque da en el objetivo. Esto crea una conveniente ilusión óptica, pues hace pensar al enemigo que el ataque ha sido todo un éxito. Entonces, el usuario puede utilizar la pérdida de atención del enemigo para atacarle desde otro punto (no es posible aparecer a sus espaldas, pues te reemplazas por un objeto del campo de batalla que puede estar en cualquier sitio) o huir del campo de batalla. Es un Ninjutsu básico que se enseña en la mayoría de las academias ninja, pero muy pocos novatos salen de la academia sabiendo usarlo perfectamente. Pocos ninjas llegan a dominarla todavía mejor, pero los que lo hacen son capaces de utilizar esta técnica como una ofensiva inesperada.
¤ Kossetsu ¤ Ruptura - Tipo: Ofensivo - Rango: S - Requisitos:Kaguya 80 - Gastos: 96 CK (multiplicable x2, ver descripción) - Daños: 160 PV ó muerte súbita (ver descripción) - Efectos adicionales: Rompe un hueso del oponente - Carga: 5 - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo
Marrow es capaz de introducir su propio chakra en el hueso o articulación de un oponente y, tras unos segundos, romperlo en varios puntos. Si se utiliza en el cráneo, el usuario necesita pagar más chakra, pero el resultado de la técnica será mortal.
¤ Karamatsu no Mai ¤ Danza del Alerce - Tipo: Ofensivo (cortante) / Defensivo - Rango: S - Requisitos:Kaguya 40 - Gastos: 48 CK (divide regen. de chakra) - Daños:
Daño/Defensa de 50 PV al recibir un Taijutsu
50 PV por golpe
- Efectos adicionales: - - Carga: 3 - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo, las espículas miden 30 centímetros de largo.
La tercera de las cinco danzas del clan Kaguya.
El usuario hace crecer desde todo su cuerpo al unísono una gran cantidad de espículas óseas puntiagudas por todo su cuerpo. Cualquier ataque físico que se le intente hacer recibirá un potente contraataque que perforará y hará sangrar a la víctima. El hecho de que la técnica sea tan rápida, combinado con que la armadura ósea puede ser utilizada durante todo el tiempo necesario para atacar, además de defender, hace que el ejecutor sea prácticamente intocable a cortas distancias. Si un oponente se acerca demasiado, basta con girar rápidamente sobre sí mismo para alejarlo lleno de cortes.
Sin embargo, si el usuario recibe un golpe superior a 50 PV, la defensa se desbarata y debe pagar el coste energético si quiere mantener la técnica activa.
¤ Generosidad de Kurama
- Requisitos: Pertenencia a los Ocho Generales de Kurama
El usuario dispone de 200 CK adicionales manteniendo un vínculo directo y perpetuo con Kurama a través de un sello. Además, será capaz de activar hasta la primera capa (con una cola) y utilizar todas las técnicas disponibles para dicha forma. El usuario obtiene la habilidad de lanzar bijuudamas desde la palma de las manos o desde la boca, incluso si no tiene activada la capa de bijuu. Gracias al vínculo con Kurama, el bijuu puede poseer momentáneamente al usuario y controlarlo como desee (sólo podrá resistirse si su Voluntad supera los 100 puntos). Kurama puede disponer del chakra adicional otorgado por esta habilidad con libertad, y retirarlo si lo ve conveniente. En momentos puntuales, Kurama puede otorgar hasta 400 puntos de CK voluntariamente, añadiéndolos de sus propias reservas.
¤ Capa de Chakra (Versión 1) - Tipo: Apoyo, Ofensivo - Requisitos: Ninguno - Gastos: 21 CK por onda de chakra - Daños:
12 PV por quemadura
25 PV por coletazo
35 PV por onda de chakra
- Efectos adicionales:
El CK del bijuu accesible del usuario regenerará si no se usa chakra del bijuu
+12 a Fuerza, Resistencia, Aguante, Agilidad y Poder
Defensa de 10 PV
-10 PV/turno en caso de no controlar al bijū
- Velocidad: Muy rápida (onda de choque) - Alcance y dimensiones: -
La primera capa de chakra forma un denso velo de energía alrededor del jinchūriki. Esta capa, similar en apariencia a un líquido en ebullición, es burbujeante y de color rojo anaranjado y dota al jinchūriki de una cierta protección física. Los cambios físicos que son experimentados son más pronunciados que durante el Aspecto de Bijū, pero además se forman las orejas encima de su cabeza y de una hasta nueve colas tras el final de su espalda a partir de la capa de chakra y con las que son capaces de interactuar con el entorno.
Para los jinchūriki que no han aprendido a controlar a sus bijū, el chakra de la bestia tenderá a ser perjudicial: experimentará un proceso de corrosión en su propio cuerpo que finalmente podría terminar dañándolo con un uso prolongado. Esto también se aplica a aquellos que entren en contacto con ellos.
Esta capa de chakra suele adquirirse por un creciente estado de rabia, tensión, estrés o peligro, cuando el sello que contiene al bijū se debilita y en consecuencia deja al jinchūriki en un estado de menor control sobre su propio cuerpo con cada cola liberada. Aunque no se ha observado que los jinchūriki lleguen a perder por completo el control en este estado, sí es cierto que se vuelven más salvajes y agresivos.
En el caso del jinchuuriki del Kyuubi, si no ha controlado a su bijuu, normalmente este estado presenta de una a tres colas. La cuarta puede ir emergiendo poco a poco. Si llega a emerger por completo, alcanza lo que se conoce como Versión 2 y pierde el control.
16/03/2023, 10:34 (Última modificación: 16/03/2023, 10:36 por Nara Jun. Editado 1 vez en total.)
Todo pasó demasiado rápido. Su decisión de darle la mano a Ranko para que salga del agua le podía costar la vida. La bala de hueso se dirigía a toda velocidad contra ellos y ella no podía hacer mucho más por cuenta propia. Sentía que esa técnica iba a reventarla en mil pedazos.
Al mismo tiempo que la kusajin se ayudó en ella para salir de allí, sus otros dos compañeros parecían preparar técnicas al unísono. Al poder respirar un poco, la coneja no titubeó en apoyar sus piernas y tomar impulso para repelerla (y repelerse también) lejos del ataque. Siete y Toshio contraatacaron con fuego y maderas, dejando completamente inútil la técnica del General.
Después del empujón que había recibido, se había concentrado en aterrizar bien, cosa de poder reincorporarse rápido.
—Buen trabajo. — Les decía a los tres mientras se volvía a parar. En esa mirada, notó que Marrow se había movido hacia otro lado, aunque no notó exactamente adonde. —¡Sigamos, es el momento!
No dudó en seguir en la dirección por la que estaban yendo, buscando llegar a tierra lo más rápido posible.
Toshio se permitió sonreír, mientras temblaba del cansancio y el miedo a partes iguales. De alguna manera habían conseguido defenderse del ataque del General de Kurama, y no solo eso, también lo habían alcanzado con el ataque de Datsue. ¡Estaba acabado! ¡Habían ganado!
O eso es lo que él creyó, aunque fuese por un momento.
— ¡Uzukage! ¡Detrás de ti! —Le gritó, en cuanto captó por el rabillo del ojo, quizás demasiado tarde, que Marrow había aparecido detrás suyo.
Las piernas del Kusajin se movieron, lentas pero desesperadas, para llevarlo de vuelta a tierra, mientras consideraba sus opciones a toda velocidad. Quería escapar ¿pero acaso podrían hacerlo? En su estado no iba a llegar muy lejos. También quería pelear y derrotar a ese desgraciado, pero no había manera de que pudiesen vencerlo.
«Sí... es imposible que venzamos a alguien tan poderoso. Tenemos que salir de aquí. ¡Tenemos que salir de aquí ya!» Era lo único que se le pasaba por la cabeza mientras se movía.
Ranko pareció reaccionar, y como si se hubiese sobresaltado, alejó a Jun de la trayectoria del cañón de hueso, así como se apartó a sí misma en un extraño y singular movimiento. Pero quizás eso llegó a ser innecesario, pues el ataque que se les venía encima fue totalmente contrarrestado por las técnicas del herrero y el pirómano. La enorme bala de hueso quedó reducida a meras astillas, incapaces de hacer daño alguno al grupo. Por otro lado, Toshio avisó al Uzukage sobre la nueva posición del General. La verdad, para Siete el movimiento había sido totalmente imperceptible. Tan solo había visto como el ataque del Uzukage así como Toshio llegaban al punto donde estaba el enemigo, y de pronto... ya no vio más. También sea dicho, no era su prioridad.
Debían huir. Fuese como fuese.
Sin apremiar a ver donde se encontraba el General, el peliblanco corrió de nuevo a ayudar a su compañera Ranko. Debían continuar la huida, y debía asistir a su compañera si quería que sobreviviesen todos. Corrió a más no poder, y para cuando alcanzase a su compañera, haría por continuar la carrera en la medida de lo posible. El objetivo estaba claro, llegar a la orilla. Evidentemente, alejándose todo lo posible de la posición de la batalla.
«Me cago en la puta... que mal negocio, hermano...»
Aún a sabiendas del trato que tenía con su superior, no podía quitarse de la cabeza esa constante pregunta: ¿Por qué se había metido en semejante jaleo?.
Las llamas incandescentes del Katon más poderoso de Uchiha Datsue ardieron sobre el mar como si este estuviese hecho de petróleo. La tormenta de fuego arrancó una sonrisa a Shukaku, maravillado por un Ninjutsu que parecía arrasar con todo.
Parecía.
Escuchó un grito a lo lejos. Alguien avisándole. Apenas giró la cabeza, demasiado tarde para reaccionar, cuando descubrió la trampa. Marrow acababa de colocarse a sus espaldas —probablemente sacrificando a alguno de los suyos en un Kawarimi—, y sus manos habían tocado hueso.
De pronto, sus costillas reventaron como si estuviesen hechas de arena seca. No, no sus costillas…
… las de Susano’o.
Si bien la armadura del Dios de la Tormenta tenía huecos al frente, por los que quizá una mano podría colarse, la espalda era infranqueable. Que no invulnerable, por lo que Shukaku acababa de comprobar. Al menos, le había salvado de desaparecer en una voluta de humo .
—¡Ahora estamos hablando! —gritó, con la mano envuelta en rayos. Giró sobre los talones, retrocediendo un rápido paso para tener más espacio entre ambos, y lanzó la mano hacia adelante—. ¡¡Canta para mí!!
De pronto, una lanza de pura electricidad surgió de su mano, buscando atravesar el abdomen de Marrow y acribillarle con múltiples cuchillas adicionales.
- PV:
2/3 golpes
–
- CK:
4/100
–
- CK de Hana:
34/250
–
-96
–
- Daño propuesto: 160 PV
- Acciones ocultas:
¤ Chidori Eiso ¤ Lanza Afilada de los Mil Pájaros - Tipo: Ofensivo (electricidad) - Rango: A - Requisitos:Raiton 60 - Gastos:
72 CK
(Raiton 80) 96 CK
- Daños:
120 PV
(Raiton 80) 160 PV
- Efectos adicionales: - - Carga: 4 - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones: La lanza tiene el ancho de la mano del usuario y alcanza los 5 metros de longitud
Esta técnica utiliza la transformación de la forma del chakra para transformar el Chidori original en una especie de lanza o espada de gran envergadura que es capaz de atravesar y cortar al oponente. Está adaptada para ataques de medio rango (con un máximo de cinco metros); con la ventaja de que el riesgo para el usuario es menor y puede utilizarla para ataques sorpresivos. De forma normal, la técnica surge en línea recta desde la mano del usuario, pero este también puede mover el brazo una única vez para cortar en lugar de penetrar.
(Raiton 80) Cuando el oponente ha sido atravesado, el usuario puede alterar la forma de la lanza para hacer surgir múltiples cuchillas adicionales que atraviesan al oponente desde distintos puntos, infligiéndole heridas de extrema gravedad.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado
Grupo 0: Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 1: Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80
Grupo 2: Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80
Grupo 5: Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
La batalla entre Marrow y el Uzukage se hacía cada vez más intensa. Mientras Hayato le ayudaba a ponerse en pie sobre la superficie del agua, Ranko pensó si podría ayudar. Tal vez podría llegar con un Shunshin detrás del general, darle una ventana a Datsue para acabar con el peliblanco.
"¿Pero qué dices? Te romperás las piernas antes de hacer nada. Ponte a salvo primero, Ranko." Se dijo, suspirando pesadamente.
—Vamos —dijo con voz trabajosa —. Aprovechemos. Esta pelea está más allá de nosotros justo ahora.
Mientras avanzaba, tan rápido como el grupo se lo permitiera, Ranko voltearía, intentando divisar alguna cabellera rubia entre el desastre. Si había la más pequeña posibilidad de encontrar y sacar a Hana, la tomaría. No podía dejarla atrás, mucho menos después de haberla salvado así.
Los prisioneros arrancaron de nuevo a correr, ahora a salvo del ataque del General y, no sin esfuerzo, terminaron llegando a la tan ansiada orilla. Pero allí, el panorama era absolutamente devastador: el anterior ataque de Shukaku había provocado la destrucción que sólo un bijū podía traer y alrededor de los shinobi ahora no había más que carpas humeantes, algunas aún en llamas, de lo que había sido el campamento de Marrow; y cuerpos tirados por doquier. Quiénes estaban vivos y quiénes habían pasado a mejor vida era algo difícil de diferenciar a simple vista... al menos, entre los cuerpos que estaban enteros.
La pregunta ahora era: ¿cuál sería el siguiente movimiento del grupo de fugitivos?
Mientras tanto, la mano de Marrow había alcanzado a su objetivo... pero sólo a aquella molesta armadura que le rodeaba. El General chasqueó la lengua, molesto. Acababa de cometer un error garrafal. Un error imperdonable. Y estaba a punto de pagarlo.
—¡Ahora estamos hablando! —exclamó Shukaku, y su mano se envolvió en un chisporroteante estallido de electricidad—. ¡¡Canta para mí!!
El Bijū giró sobre sus talones, retrocedió un rápido paso y entonces lanzó la mano hacia delante. No hubo oportunidad alguna para el General. Habiendo gastado prácticamente todo su chakra en la ofensiva anterior y con su cuerpo agotado como para realizar cualquier otro movimiento instantáneo, Marrow se vio privado de cualquier tipo de salvación. Su cuerpo se inclinó hacia delante cuando se vio atravesado de parte a parte por aquella lanza de relámpago que se bifurcó en el interior de su cuerpo. Ni siquiera la dureza de sus huesos podía protegerle de un ataque desde el interior.
Con su último hálito, antes de perder el conocimiento, Marrow dejó escapar una última frase en apenas un susurro:
—No tenéis... nada que hacer... Kurama... nos vengará... y se alzará como Emperador...
Mientras huía con el rabo entre las piernas junto al resto del grupo, Toshio no podía quitarle la mirada al que sería el último intercambio entre Uzukage (o mejor dicho, el Shukaku) y Marrow.
Toshio lo sabía bien. Los Bijū, los generales y, joder, hasta los Gebijū eran bestias inmortales, peligrosas e invencibles muy superiores a cualquier humano. Para él, el esfuerzo que estaba haciendo el Uzukage era algo realmente heroico, enfrentándose a uno de esos monstruos a sabiendas de que era un combate perdido.
Qué equivocado que estaba, ni siquiera se había imaginado que Marrow estaba peleando contra un monstruo incluso más temible.
— No puede ser... —Había pasado de correr a caminar, mientras contemplaba incrédulo la escena—. Lo ha...
Agitó la cabeza. ¿Era el momento de celebrar o solo había sido una victoria momentánea? ¿Se lo volvería a levantar? ¿Solo era la ilusión de otro Kawarimi? Miró a su alrededor, pero Marrow estaba tardando demasiado en volver a aparecer.
— ¡Ranko! —Llamó a su compañera—. Ranko ¿ves a tu amiga en algún lado? Podemos sacarla de aquí. Estamos a tiempo.
Seguía mirando a su alrededor con nerviosismo mientras le daba tiempo a Ranko de buscar a Hana. No podía creerse que estuviesen a salvo todavía, quizás uno de los cuerpos se volvían a levantar, o alguien se estaba escondiendo bajo tierra, o Ruhara estuviese oculta en el agua. O... o algo. No había manera de todo hubiese terminado ya.