20/10/2016, 15:36
Eri sonrió ante todas las respuestas que le habían dado sus dos compañeros de villa, pero no pudo evitar sonrojarse cuando mencionó que iba a necesitar un baño dentro de poco. Sin embargo, tanto Riko como Juro también debían volver a sus respectivas casas, así que tanto ella como su rebelde estómago se vieron aliviados.
— Entonces, todavía tenemos una comida pendiente. — Siguió la corriente de Juro. — Dejadme un poco de margen para que este plato se asiente, y si queréis, podemos vernos dentro de poco.
Se acercó al jefe del local y se despidió de el con un sonoro ''hasta luego'' que también contestó el otro chico que había en la barra, luego se acomodó su bandana que se había soltado con tanto movimiento y se arregló la túnica que llevaba.
— Espero veros pronto. — La kunoichi movió las manos de forma anímica, y con eso, desapareció con camino tranquilo pero sin pausar ni un segundo.
No fue más allá cuando contó los diez pasos cuando se giró.
— ¡Y la próxima vez decís vosotros el lugar, y ponéis el dinero! — Guiñó su ojo derecho y acto seguido, saltó a una de las casas contiguas y se alejó de la escena, quedando solo dos chavales del remolino.
— Entonces, todavía tenemos una comida pendiente. — Siguió la corriente de Juro. — Dejadme un poco de margen para que este plato se asiente, y si queréis, podemos vernos dentro de poco.
Se acercó al jefe del local y se despidió de el con un sonoro ''hasta luego'' que también contestó el otro chico que había en la barra, luego se acomodó su bandana que se había soltado con tanto movimiento y se arregló la túnica que llevaba.
— Espero veros pronto. — La kunoichi movió las manos de forma anímica, y con eso, desapareció con camino tranquilo pero sin pausar ni un segundo.
No fue más allá cuando contó los diez pasos cuando se giró.
— ¡Y la próxima vez decís vosotros el lugar, y ponéis el dinero! — Guiñó su ojo derecho y acto seguido, saltó a una de las casas contiguas y se alejó de la escena, quedando solo dos chavales del remolino.