31/10/2017, 01:38
Kaido voló entre las aguas como un delfín, con su puñal por delante. Nadó, y nadó, a tal punto de pillar casi por sorpresa al enemigo, quien sólo se percató a tiempo como para recibir el desliz de aquel filoso kunai, y hacer uso de la técnica insignia del clan. Aquel brazo herido se disolvió apenas el tiburón dio su primera mordida, que embocó a tal velocidad que estuvo obligado a seguir de largo.
Para cuando logró frenarse y voltear el cogote, Aotsuki Zetsuo ya se había tomado la molestia de subir con Mogura a la superficie. Kori, por el contrario; habría tomado rápida acción en contra del Hozuki, quien no aguardó a perderse entre las aguas para no convertirse en, probablemente, un centenar de copos de hielo.
«Maldita sea, tenemos que movernos rápido. Quién sabe cuántos más de estos tipos hay por aquí camuflados esperando para cargarse al grupo de a uno en uno»
Entonces, buscó llamar la atención Kori. Comenzó a mover sus brazos, señalándose a sí mismo y luego, a uno de ellos. ¿Y qué era lo que intentaba comunicarle? pues, más o menos, que quizás si él les iba llevando a cuestas uno por uno llegarían todos más rápido.
Para cuando logró frenarse y voltear el cogote, Aotsuki Zetsuo ya se había tomado la molestia de subir con Mogura a la superficie. Kori, por el contrario; habría tomado rápida acción en contra del Hozuki, quien no aguardó a perderse entre las aguas para no convertirse en, probablemente, un centenar de copos de hielo.
«Maldita sea, tenemos que movernos rápido. Quién sabe cuántos más de estos tipos hay por aquí camuflados esperando para cargarse al grupo de a uno en uno»
Entonces, buscó llamar la atención Kori. Comenzó a mover sus brazos, señalándose a sí mismo y luego, a uno de ellos. ¿Y qué era lo que intentaba comunicarle? pues, más o menos, que quizás si él les iba llevando a cuestas uno por uno llegarían todos más rápido.