11/02/2019, 00:12
(Última modificación: 11/02/2019, 00:14 por Amedama Daruu. Editado 1 vez en total.)
Hanabi sonrió.
—Si perteneces a Uzushiogakure, estoy orgulloso de ti —aseguró—. Seas ninja o no, tú tampoco tienes que avergonzarte de nada. —Hanabi se encogió de hombros y suspiró—. Mira... Puedes seguir mi consejo, que en absoluto es una orden, o puedes probar a trabajar en la forja con tu padre. Eres muy joven, y tienes toda la vida por delante.
»Pero si aceptas quedarte con tu bandana, no tendré problemas en que te des un viajecito por ahí... Tú verás. Igual... se te despejan las ideas.
—Si perteneces a Uzushiogakure, estoy orgulloso de ti —aseguró—. Seas ninja o no, tú tampoco tienes que avergonzarte de nada. —Hanabi se encogió de hombros y suspiró—. Mira... Puedes seguir mi consejo, que en absoluto es una orden, o puedes probar a trabajar en la forja con tu padre. Eres muy joven, y tienes toda la vida por delante.
»Pero si aceptas quedarte con tu bandana, no tendré problemas en que te des un viajecito por ahí... Tú verás. Igual... se te despejan las ideas.