6/11/2020, 18:28
Luego de un tiempo de silencio, Kintsugi se agachó para sacar un pergamino de un cajón de su escritorio. Se trataba de una misión de rango D que utilizarían como señuelo para llamar el interés de la Guerrilla.
«Una demostración de Taijutsu». Pensó Daigo, sonriendo. «Eso es básicamente lo que hacemos todos los días».
Daigo se levantó y también le dedicó una reverencia a su Morikage a la vez que su compañera.
—Muchas gracias por confiar e-en nosotros. Lo daremos todo d-de nuestra parte. Pase un excelente día, mi señora Morikage.
— ¡No la decepcionaremos! —Exclamó, antes de marcharse si no se lo impedía.
Al salir, el peliverde le devolvió el pegarmino a Ranko.
— Mis padres irán a ayudar en la cafetería en un rato, así que podremos estar solos. —Le comentó—. ¿Te vienes?
«Una demostración de Taijutsu». Pensó Daigo, sonriendo. «Eso es básicamente lo que hacemos todos los días».
Daigo se levantó y también le dedicó una reverencia a su Morikage a la vez que su compañera.
—Muchas gracias por confiar e-en nosotros. Lo daremos todo d-de nuestra parte. Pase un excelente día, mi señora Morikage.
— ¡No la decepcionaremos! —Exclamó, antes de marcharse si no se lo impedía.
Al salir, el peliverde le devolvió el pegarmino a Ranko.
— Mis padres irán a ayudar en la cafetería en un rato, así que podremos estar solos. —Le comentó—. ¿Te vienes?
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.