12/03/2023, 11:33
— Estoy buscando a un tal... Hotto Inu
El tabernero le dedicó una mirada tierna a Ren. Parecía que la chica no era consciente de que ese nombre no era del todo serio. Sin embargo, la segunda parte del discurso de la kunoichi le hizo ponerse serio de nuevo.
— Creo que es para recuperar una espada de un demonio... O... Algo así
No fue exactamente que se pusiese a la defensiva, pero se cruzó de brazos, algo incomodo con el tema. Se atusó el bigote un segundo y procedió a hablar, no sin antes ser interrumpido por el otro hombre que había sentado en el taburete.
— ¡La espada de la leyenda! ¿Robada? ¡No puede ser! — era un hombre bastante más mayor que el tabernero y también bastante más alterado.
— Takashi, no sueltes esas cosas. Se las van a creer. — suspiró y se apoyó en la barra, intentando bajar el tono. — Mira, hay una cascada al oeste. Durante generaciones se ha dicho que hay una especie de santuario tras la cascada, pero vamos, que eso se dice de cada cascada del universo. No hay nada tras la cascada, solo una pared de rocas puntiagudas. No hay santuario, no hay espada legendaria y ese lugar está siempre infestado de lobos salvajes. Así que no se va ahí. — eso último lo dijo en algo, mirando tras Ren, a la puerta.
Los niños se dispersaron ante la obviedad de que habían sido descubiertos.
El tabernero le dedicó una mirada tierna a Ren. Parecía que la chica no era consciente de que ese nombre no era del todo serio. Sin embargo, la segunda parte del discurso de la kunoichi le hizo ponerse serio de nuevo.
— Creo que es para recuperar una espada de un demonio... O... Algo así
No fue exactamente que se pusiese a la defensiva, pero se cruzó de brazos, algo incomodo con el tema. Se atusó el bigote un segundo y procedió a hablar, no sin antes ser interrumpido por el otro hombre que había sentado en el taburete.
— ¡La espada de la leyenda! ¿Robada? ¡No puede ser! — era un hombre bastante más mayor que el tabernero y también bastante más alterado.
— Takashi, no sueltes esas cosas. Se las van a creer. — suspiró y se apoyó en la barra, intentando bajar el tono. — Mira, hay una cascada al oeste. Durante generaciones se ha dicho que hay una especie de santuario tras la cascada, pero vamos, que eso se dice de cada cascada del universo. No hay nada tras la cascada, solo una pared de rocas puntiagudas. No hay santuario, no hay espada legendaria y ese lugar está siempre infestado de lobos salvajes. Así que no se va ahí. — eso último lo dijo en algo, mirando tras Ren, a la puerta.
Los niños se dispersaron ante la obviedad de que habían sido descubiertos.