Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
¡Si estaba al lado tuya, solo quería ojear unos pocos para ver si había alguno que me interesara! ¡¿Que no quiero saber nada de tí?! ¡Eres ahora mismo lo más importante de mi vida!

¡Pues bien que me has soltado la mano en cuanto has tenido la oportunidad! Y ni me has mirado cuando hemos salido de la habitación. — se cruzó de brazos, dejando el batido encima de la mesa momentaneamente.

Se había puesto de pie, lo cual solo había conseguido que estuviese más o menos a la misma altura que Ren, que estaba sentada. ¿Cuanto podía crecer una persona en tan solo unos meses? ¡Ella no había crecido ni un solo centimetro!

Encima de que me has hecho ir yo a por el chocolate. Ya no me quieres, me odías, admitelo.

Era una forma muy estúpida de lidiar con toda la tensión y los sentimientos encontrados que tenía, pero era la única que conocía. Patalear y encapricharse como una niña pequeña. Con la contra de que cuando algo salía ligeramente mal en su capricho, todo se tornaba rápidamente enfado.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Las palabras de Hana solo la estaban enfadando por momentos. Sabía que era una de sus rabietas, era capaz de identificarlas pese a que hubiera pasado tanto tiempo, aunque no por ello las toleraba. Sobre todo algunas que le parecían más infantiles de lo normal. Seguramente si no hubiera estado tan mentalmente inestable, no hubiera dicho aquellas palabras, pues deseaba encontrar un momento y lugar ideal; que rozase casi lo mágico, para expresarle los sentimientos que más al fondo de su corazón habían aflorado tanto.

¡Sí, es cierto! ¡No te quiero, no te quiero como hermana! ¡No te quiero como hermana porque ya no te veo así! — gritó desviándole por completo la mirada, para que no la viera descomponerse por completo, para seguir con una quebrada voz—. No te quiero como hermana porque te quiero como algo más... Te quiero. Mucho, tanto que me duele

Se llevó una mano al pecho, encima de su corazón, arrugando su camisa y mordiéndose el labio inferior.

N-No sé desde cuando ese sentimiento de hermandad se ha transformado en esto... Y supongo que me he estado aprovechando más de la cuenta, ya fuera consciente o inconsciente de ello... Y no quería hacerlo, pero solo quería estar contigo. Todo lo posible. Sin importar como, cuando o el lugar. Aunque tuviera que ser tu hermana y arriesgarme a ver como te vas con otra persona.

Ren siguió negandose a mirarla, y por suerte su alargado flequillo era perfecto para ello. Si no se lo arreglase, le taparía hasta un poco más allá de la nariz. De hecho, llegaba hasta su boca.

» Si eso es lo que te hace feliz, me da igual. Si a cambio puedo seguir viéndote sonreír.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
Tenía aproximadamente un docena de chocolatinas en los brazos, lo único que había dejado sobre la mesa era el batido y todas ellas se cayeron de sus manos.

No te quiero como hermana porque te quiero como algo más... Te quiero. Mucho, tanto que me duele

Se rió, porque era una broma ¿verdad? No... no podía decirle eso después de todo lo que había pasado. No podía sentirse así. ¿Cómo iba a sentirse así? Por ella. No, no, no. Intentó recular lentamente y se tropezó con la pata de la mesa, quedando sentada de culo en el suelo. Se le hizo un nudo en la garganta, le temblaban las manos.

¿Qué iba a decirle? Algo tenía que decirle. Claro que la amaba. Lo había hecho desde los dojos, donde la había besado a traición cuando estaba inconsciente porque no tenía el valor para hacerlo cuando estaba serena. Pero desde entonces le había fallado espectacularmente. Había desaparecido, había huido y la había torturado con su ausencia, sin saber si estaba bien o no, sin noticia alguna.

¿Cómo iba a devolverle ahora todo lo que le había dado? ¿Cómo iba a hacer reciproca la felicidad que Ren le había otorgado y priorizado siempre? Si en cualquier momento podía decir que quería la Luna y enfadarse porque no lo consiguiese.

» Si eso es lo que te hace feliz, me da igual. Si a cambio puedo seguir viéndote sonreír.

Se sonrojó violentamente al procesar todo lo que le había dicho su hermana. Había estado tan pendiente de sus preocupaciones que había dejado las palabras en cola y ahora habían entrado todas de golpe, dandole demasiado trote a su corazón.

Tú... tú... yo no... eeehhh... — estaba roja, estaba sudando, su mirada iba a todas partes excepto a Ren y estaba arrastrandose hasta que encontró la pared. — Es... tú... cómo...

No creía merecerselo, obviamente, pero no era de hielo, todas las cosas que le decía Ren eran preciosas y la había pillado con la guardia muy baja. ¿Cuanto hacía que estaba pensando en ella de esa forma? Hace un momento estaba sobre sus... ¡abrazadas! Estaban abrazadas.

Su mente empezaba a nublarse tanto como su mirada, el verano había llegado a su cabeza, porque sentía un calor inhumano.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Fuera la que fuera la opción que tomara Hana, su relación iba a cambiar por completo y jamás volvería a ser como antes. La rubia tartamudeó, poco a poco enmudeció.

¡Te quiero Himura Hana! ¡Te quiero más que a mi propia vida, eso es lo que pasa! — Gritó esta vez mirándola directamente.

Tenía un leve rubor en sus mejillas que contrastaba con la oscuridad de sus cabellos negros, su pálida piel y sus ojos azules perlados por las lágrimas con grandes pestañas. Se aferró aún más a su camisa, y movía los labios de forma nerviosa.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
¡Te quiero Himura Hana! ¡Te quiero más que a mi propia vida, eso es lo que pasa!

Hace meses, hubiese dado botes de alegría de oír esas palabras. Ahora le parecía que estaba aprovechándose de los miedos de Ren. Desde que habían vuelto había estado temerosa, seguramente pensando que Hana era una inestable y podía desaparecer en cualquier momento.

Esta era la forma de Ren de superar ese miedo. Porque no podía quererla de esa manera, ¿verdad? No, no podía. Con la claridad de mente que le daba aquella idea se levantó con una sonrisa conciliadora.

Ren. — llamó mientras le cogía una mano con suavidad. — No hace falta que hagas esto. No voy a volver a desaparecer, te lo prometo. No hace falta que seamos algo más. Algún día encontrarás a alguien especial. Alguien fuerte, sincero, honesto, que te haga feliz. No necesitas a una niña inestable y más floja que un constipado a tu lado.

Amplió su sonrisa, vaciando su alma. No, Ren no sabía lo que decía. ¿Qué iba a poder ofrecerle ella? Ni siquiera vivían en la misma villa. Se verían una vez al mes máximo. ¿Y para qué? Vivía a base de caprichos. Dando bandazos con su temperamento volátil. Y en unas semanas iría a la guerra.

¿Y si ahora le daba esperanzas a Ren y después desaparecía para siempre? No, había que hacerle ver que en verdad no quería tanto de ella.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Claro que la rechazó. Por supuesto que la rechazó, ¿cómo si no iba a ser? ¿Quién querría tenerla a ella como pareja? Obviamente, nadie, si tan solo era un lastre y ahora encima ni siquiera era capaz de blandir una espada en condiciones. Tenía dificultades hasta con un palo de madera, como para llegar a sostener una espada de verdad.

Frunció el ceño en un gesto de tristeza y decepción, sabía que era un escenario más que posible, pero igualmente era algo en lo que no quería pensar. ¿Y ahora qué? Sí, era posible que llegara a encontrar a alguien en un futuro que la quisiera.

Alguien especial

No — y sus lagrimas empezaron a desbordarse.

Fuerte.

No — comenzó a encorbarse hacia delante, sobre la mesita.

Honesta.

No — su mano temblaba, pero era incapaz de soltar a Hana.

Que no fuera una carga.

No — su voz estaba completamente quebrada.

Y que no fuera una caprichosa.

No... No, no, no... ¡No y no! ¡Y mil veces no! — Gritó —. ¡Yo quiero a esa niñata infantil y caprichosa, con aires de superioridad y princesa! ¡Esa es mi persona especial! ¡Tú eres mi persona especial! ¡Tú y nadie más! ¡Si de algo estoy segura ahora mismo, es de lo que siento por tí!
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
No... No, no, no... ¡No y no! ¡Y mil veces no! ¡Yo quiero a esa niñata infantil y caprichosa, con aires de superioridad y princesa! ¡Esa es mi persona especial! ¡Tú eres mi persona especial! ¡Tú y nadie más! ¡Si de algo estoy segura ahora mismo, es de lo que siento por tí!

Miró los ojos de Ren, tan hipnotizada como cuando se reencontraron. Tenía que decirle algo, tenía qué negarlo todo. Negar que la quisiese, negar que la necesitase, negarse a sí misma para protegerla.

Y-yo también te quiero. — se sorprendió de sus propias palabras, ese no era el plan, estúpido cerebro. — Pero tengo miedo.

Confesó finalmente, bajando la mirada y escondiendola tras sus manos, que limpiaban las lágrimas una tras otra.

No quiero que te arrepientas. No sé qué hacer ni cómo hacerlo la mayor parte del tiempo. No sé cómo funciona todo esto y tú eres tan buena que no quiero obligarte a lidiar conmigo. Claro que te quiero, ¿cómo no iba a hacerlo? Eres la chica más dulce y amable que he conocido. Ni siquiera me has dicho nunca nada por mis problemas. Siempre me has tratado bien y siempre he querido más, pero pensaba que tú solo me veías como una niña, que al final, es lo que soy. Una niña estúpida e ignorante haciendo de adulta.

Siguió frotándose los ojos, acurrucada en el suelo, sin saber qué más decir ni cómo reaccionar.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
¿Era eso verdad? ¿No lo estaba diciendo por presión? ¿Realmente Hana sentía algo más profundo por ella de lo que Ren pensaba? La morena avanzó hasta ella, gateando hasta que tan solo un par de centímetros las separasen.

Si alguien debería arrepentirse de esto, deberías ser tú. Soy incapaz de blandir una espada como en antaño, no tengo un gran ingenio o soy tan lista como tú. ¡Solamente por eso último ya pienso que jamás te podrías fijar en mí de la misma forma que yo lo hacía por ti! ¡¿Quién querría estar con una llorona estúpida?! No tengo nada que poder darte ni ofrecerte, ni tan siquiera soy graciosa o guapa. ¡Puede que seas algo infantil, pero ya únicamente por el simple hecho de reconocerlo, eres más adulta que muchos otros! — busco las manos de ella con las suyas sin despegarlas del suelo, y las dejaría posadas encima de su dorso.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
Ren hizo lo único que Hana no podía tolerar en ningún contexto. Insultar a Ren. Ni siquiera aunque lo hiciese ella misma.

¡Eso es mentira! ¡No eres ninguna llorona estúpida! Y si estás como estás es precisamente por mi culpa, lo cual no es más que otro motivo que añadir a la lista interminable de por qué deberías alejarte de mí. Tú eras fuerte, pero ahora estás así por mí. Sin mí hubieses seguido creciendo y ahora serías chunnin, o kage. Y mira lo que te he hecho, todo es culpa mía. — y lloró como hacía meses que no lloraba, porque hasta el discurso de Datsue había enterrado todos sus sentimientos y los que no reflotaron entonces lo estaban haciendo ahora.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Se abalanzó sobre ella, abrazándola e impidiendo que tuviera cualquier maniobrabilidad con sus brazos, que no fuera unos escasos movimientos con las manos.

Si llegue hasta ese punto, fue gracias a ti. Tú te has convertido en mi fuerza, tú te has convertido en mi fortaleza, en mi determinación, y en mi inspiración para seguir adelante — subió las manos hasta sus mejillas, sosteniendo su cara con estas—. Así que ahora hazte responsable de estos sentimientos

Y la besó.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
Si llegue hasta ese punto, fue gracias a ti. Tú te has convertido en mi fuerza, tú te has convertido en mi fortaleza, en mi determinación, y en mi inspiración para seguir adelante Así que ahora hazte responsable de estos sentimientos

Y la agarró y la besó. Hana quiso revolverse, apartarla del enorme error que estaba cometiendo, y lo hizo cerrando los ojos y abrazando la nuca de Ren de forma casi automatica. Todos esos pensamientos confusos que tenía y tanto la atormentaban se deshicieron uno a uno con la humedad de las lagrimas de ambas encontrandose en sus labios.

Si Ren cortaba el beso, sería ella quien lo retomase, sin darle tiempo a recuperar el aliento siquiera. No quería volver a pensar, pensar era pesado y oscuro, estar entre los brazos de Ren era ligero y claro. Cuando finalmente sintiese que su exhermana fuese a quedarse sin nada de aliento, se separaría lentamente, sin abrir los ojos.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Quiso que fuera algo breve, pero intenso y decidido. Cuando sus labios se separaron dejando escapar un suspiro, los de Hana atraparon los suyos, negándole el escape pasando las manos por la nuca de la morena. No fue hasta que ambas se quedaron con falta de aliento que una dejó escapar a la otra. Los ojos de Ren estaban entrecerrados, brillaban con intensidad y sus pupilas estaban tan dilatadas como un gato en la más profunda noche. Sus mejillas, por otra parte, mantuvieron un color rosado de rubor, digno del color de un melocotón maduro.

Puede que Hana dijera algo, puede que intentara pararla de nuevo. Pero Ren la tomó de las muñecas para tumbarla sobre el mar de cojines, buscando volver a saborear sus dulces labios. La cabeza le daba vueltas, pero jamás se había sentido tan despreocupada y ligera en la vida. Si ya había aceptado en su corazón aquel tiempo que había estado separada de ella, ahora prácticamente lo había olvidado por completo. La amenaza de la guerra era completamente algo ajeno o inexistente.

En aquel basto mundo, entre todos los lugares del espacio y el más allá, de este plano y de cualquier otro. Solo quería estar en esa habitación, besándola.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
Podría detener a Ren en cualquier momento o tomar el control de la situación, pero la mirada que tenía la morena y su determinación solo hacían que Hana quisiese dejarla hacer. Solo saber que ella de verdad quería estar con ella hasta el punto en el que estaban, le hacía arder el corazón, que latía a mil por hora.

Ren la agarró y la tumbó sobre los cojines, sin dejar de besarla y ella respondió de forma acorde. Apenas veía, con los ojos practicamente cerrados todo el rato, se dejaba guiar por su boca y sus manos hasta donde estaba la única persona a la que deseaba en este mundo. La estrechó con fuerza, asegurandose de que no se escapaba, para seguir besandola.

Si no la paraba, seguiría así hasta que se hiciese de noche o las echasen, lo que sea que llegase antes, si es que no llegaban ambas a la vez.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder
Pero la rubia parecía tan decidida como ella a mantener los besos y las caricias, a lo que Ren no podía estar más encantada. Separó sus labios solo para recorrer sus mejillas con ellos, suspirando sobre ella en todo momento de forma pesada con el cuerpo ardiendo y el corazón bombeando con fuerza.

Te lo diré hasta que me quede sin saliva, que se me rasguen las cuerdas vocales o hasta que llegue el fin de los tiempos —suspiró una última vez sobre su oreja mientras le susurraba en todo momento con una melodiosa y suave voz —. Te quiero, Himura Hana

Volvió a besarle la mejilla, y posteriormente se quedó sentada sobre ella con las piernas en los laterales de la uzujin. Hana podría levantarse, escaquearse o lo que quisiera con total facilidad y Ren no se lo impediría, pues estaba completamente embelesada, con algún mechón de pelo cruzando su rostro y su flequillo bastante desordenado.
Hablar (Royalblue)Pensar (MediumOrchid)

¡Gracias a Ranko por el avatar!
Responder
Te lo diré hasta que me quede sin saliva, que se me rasguen las cuerdas vocales o hasta que llegue el fin de los tiemposTe quiero, Himura Hana

Y yo a ti. — contestó con un hilo de voz antes de echarse encima de Ren de nuevo.

Lo hizo con toda la intención de besarla de nuevo, pero al acercarse se vio completamente invadida por esos hermosos ojos azules mirandola con toda la intención del mundo. La miraba como si fuese la cosa más preciosa del mundo y ella solo le devolvía una calurosa mirada de intriga, como la de un perro cuando está inspeccionando algo nuevo.

¿Acaso siempre la había mirado así y no se había enterado? Tal vez lo había obviado por el bien de su hermandad. Y hablando de su hermandad. A escasos centimetros de ella, entrelazando sus manos con las de Ren, la miró y la preguntó:

Si ya no somos hermanas, ¿ahora qué somos? — lo dijo con la voz más dulce y agradable del mundo, mirando a su hermana con inocencia.


Avatar obra de Sagiso Ranko


Responder



This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.