Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
30/05/2017, 17:01 (Última modificación: 30/05/2017, 17:01 por Manase Mogura.)
De alguna forma le alegraba ver que Daruu no había olvidado las viejas tradiciones. A diferencia de muchos otros que había visto hace poco pelear y ciertamente terminar un poco mal.
«Byakugan...»
Sentía que debería saber algo más sobre ese poder del muchacho, lo conocía hace tanto tiempo y nunca se había molestado realmente en investigar cuales eran sus exactas capacidades. Probablemente terminaría aprendiendo aquel día de la forma que menos le gustaba, a los tortazos.
La guardia que había adoptado Mogura recordaría un kamae de karate, los pies un poco separados y las piernas ligeramente flexionadas, la cadera levemente rotada, su puño derecho se posicionó sobre su ombligo mientras que su brazo izquierdo se flexionaba ligeramente hacía adentro y su puño izquierdo quedaba elevado a la altura del pecho.
El golpe de Daruu era rápido, pero no lo tomó por sorpresa. De igual manera Mogura no era ningún maestro del Taijutsu y lo único que intentó hacer fue desviar el puñetazo hacía afuera con su brazo izquierdo. Su siguiente acción sería deslizar sus pies por el suelo hacía su derecha, consideraba que era la mejor forma de evitar una reacción inmediata por parte de su contrincante.
31/05/2017, 13:03 (Última modificación: 29/07/2017, 02:36 por Amedama Daruu.)
Tanto Mogura como Daruu sabían de sobra que el primer golpe del Hyuuga no era más que una pantomima para iniciar el sparring, y sin embargo el ninja médico cometió el error de esquivar hacia el lado que no debía. El golpe de Daruu venía con la izquierda, y fue con la izquierda con la extremidad que Mogura desvió el golpe. Daruu utilizó la inercia del desvío para voltear jugando con la posición de los pies y no perder distancia con su contrincante, lo que le dejaría justo delante de su pecho.
«¡Ahora!»
Daruu movió la diestra con presteza e impactó la palma de su mano sobre la boca del estómago del médico, con la intención de hacerle perder el aliento momentáneamente gracias al chakra del Juuken. Entonces, daría un bote y, con la rodilla flexionada y adelantada, trataría de golpear su barbilla y derribarlo.
120/120
–
124/140
– (regen. dividida) 20 metros de hilo, 3 bombas de humo, 2 kunai y 1 antídoto en el portaobjetos, atado al muslo derecho 20 senbon, en 4 paquetes de 5 atados en el cinturón
Daños previstos: 16 PV por juuken, 11 PV por rodillazo
Técnicas utilizadas
¤ Juuken ¤ Puño Gentil - Tipo: Ofensivo - Rango: S - Requisitos: Hyuuga 25, Byakugan activado (contra oponentes) - Gastos: 5 CK/ráfaga - Daños: 8 PV/ráfaga, +2 PV adicionales por cada 10 de Poder - Efectos adicionales: (ver descripción) - Sellos: - - Velocidad: Instantánea - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo
El Juuken es el estilo de combate cuerpo a cuerpo característico del clan Hyuuga, que aprovecha al máximo las capacidades visuales otorgadas por el Byakugan. Consiste en la inserción minuciosa del chakra propio en el sistema circulatorio del chakra del oponente, dañándolo y también dañando a los órganos internos situados cerca de la zona afectada. Al tratarse de daños internos, la resistencia de un oponente, por muy entrenado que esté, no tomará ningún partido, y el Hyuuga ni siquiera necesitará hacer un gran esfuerzo por cada golpe, ya que bastará con una simple caricia o "toque" (de ahí el nombre de puño gentil). El usuario puede atacar con dos dedos o con las palmas, concentrando o repartiendo el daño inflingido según sus necesidades, hiriendo en mayor o en menor medida a un adversario.
Normalmente, uno necesita el Byakugan para sacarle el mayor provecho, pero el Juuken puede utilizarse para bloquear armas en lanzamiento (armas pequeñas automáticamente, armas grandes sólo si el daño del Juuken supera el daño mayor del arma) con ráfagas de más potencia. Incluso, si el daño total del Juuken lo permite, las ráfagas pueden utilizarse para destruir o bloquear técnicas de Ninjutsu enemigas, pues este estilo puede destruir cualquier sustancia basada en chakra.
(Hyuuga 60) Al obtener la habilidad del Byakugan de ver los Tenketsu, el Juuken se vuelve mucho más demoledor. El miembro del clan Hyuuga puede cerrar o abrir los puntos del chakra del oponente de golpe, bloqueando o descontrolando su flujo del chakra. Esto le permite golpear a su oponente en el pecho cuando iba a expulsar una técnica por la boca, o golpear en la muñeca para parar una técnica que fluje a través de ahí. Estos golpes quitan 8 PV sin ninguna bonificación adicional, pero pero con tres de ellos el Hyūga puede impedir la regeneración de chakra de su adversario, hasta que pasen 3 turnos sin recibir un ataque de este estilo. Con 6 golpes, todas las técnicas le costarán 10 CK extras. Y con 10 golpes, 15 CK extras.
Mogura era lo suficientemente maduro como para admitir que sus reflejos eran un asco, sobretodo comparado con los que demostraba tener el muchacho de ojos blancos. Estaba seguro de que aquel golpe inicial era solo uno de muchos otros que iba a recibir durante el combate.
No solo el desvío parecía haber sido previsto por Daruu sino que también esa nueva ubicación que había tratado de buscar, con la elegancia propia del estilo de combate de los Hyuuga, el muchacho lanzaría un segundo golpe. Si el médico hubiese sido más ágil podría haber intentado alguna otra cosa pero sus opciones eran sumamente limitadas.
Su brazo izquierdo dio un codazo hacía atrás con la intención de ayudar a su cuerpo a rotarse ligeramente y que su brazo derecho tomara mayor velocidad, que mal no le venía. La intención era desviar nuevamente el golpe, esta vez hacía abajo y hacía afuera, acompañando la inercia que cargaba.
«Volverá a intentar dar otro golpe con sus manos.»
Pensaría Mogura y sería ahí cuando recibiría el golpe de lleno. Retrocediendo torpemente para luego caer de espaldas, le hubiese gustado llevar la bandana en su mentón en aquel momento, pero ese no era su estilo.
Mh...
Dejó escapar una especie de alarido mientras se llevaba ambas manos a la cara. Daruu podría pensar que Mogura exageraba pero él no estaba hecho de papel seguramente.
2/06/2017, 10:22 (Última modificación: 29/07/2017, 02:36 por Amedama Daruu.)
Mogura desvió su segundo golpe de forma habilidosa, pero Daruu, sin descanso, siguió atacando, y finalmente el rodillazo impactó de lleno en su mentón. El médico retrocedió y cayó de espaldas, se tapó la cara y soltó un alarido de dolor. Aunque se tratase de una pelea de entrenamiento, Daruu tenía la adrenalina por las nubes, y desde luego estaba en su renovada determinación no perder por nada del mundo, y tratar de ganar lo más sobradamente posible.
De modo que mientras Mogura estaba aturdido y con la vista tapada. Daruu formuló tres rápidos sellos y se preparó para escupir agua.
De sus labios surgió una ola de remolinos furiosos que abarcaba casi cuatro metros de ancho hacia el dolorido Mogura, tumbado en el suelo e incapacitado.
—¡Suiton: Mizurappa!
120/120
–
88/140
– (regen. dividida) 20 metros de hilo, 3 bombas de humo, 2 kunai y 1 antídoto en el portaobjetos, atado al muslo derecho 20 senbon, en 4 paquetes de 5 atados en el cinturón
Daños previstos: 60 PV por mizurappa multiplicado por 3
Técnicas utilizadas
¤ Suiton: Mizurappa ¤ Elemento Agua: Ola de Agua Salvaje - Tipo: Ofensivo - Rango: C - Requisitos: Suiton 10 - Gastos:
12 CK
(Suiton 20) (multiplicable x2)
(Suiton 30) (multiplicable x3)
- Daños: 20 PV - Efectos adicionales:(Suiton 80) El chorro de agua puede ser lanzado de forma parabólica, aunque no alcanza el ancho de la técnica hasta que no está a 3 metros del objetivo - Sellos: Dragón → Tigre → Liebre - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones:
La técnica avanza 3 metros, y goza de 1'5 metros de anchura (multiplicado x1)
La técnica avanza 8 metros, y goza de 2'5 metros de anchura (multiplicado x2)
La técnica avanza 10 metros, y goza de 4 metros de anchura (multiplicado x3)
Tras la realización de los sellos, el usuario expele agua desde su boca, como se tratase de una cascada con forma de trompeta, que arrasa con el adversario y lo derriba. El ejecutor de la técnica puede controlar su poder libremente administrando la cantidad de chakra que libera al utilizarla. Es una técnica básica de elemento agua.
3/06/2017, 16:00 (Última modificación: 29/07/2017, 02:36 por Amedama Daruu.)
Le costaba bastante reponerse de un golpe como el que había recibido, la capacidad del médico para recibir golpes era muy pobre. Razón por la cual no pudo hacer absolutamente nada para evitar el siguiente movimiento por parte de su contrincante.
—¡Suiton: Mizurappa!
Daruu parecía haberse dejado las balas de goma en su casa y disparaba con calibre de guerra. Un espectador podría preguntarse de que iba. ¿Intentaba acabar con la vida de su viejo compañero de academia?
La masa de agua arrastró a Mogura como una brisa de otoño saca volando un puñado de hojas secas que han caído al piso. Cualquier cantidad de tierra que podría haberse llevado consigo sería lavada por el resto del agua que fue empujándolo mas y mas.
Su vista se oscureció por un segundo y sintió casi al instante la falta de aire, sentía como si lo hubiese pasado por encima un carro tirado por 100 caballos, si no había muerto había estado a un pelo de hacerlo.
Por un momento Daruu no vería otra cosa que la espalda de Mogura, un inerte Mogura que parecería mas muerto que vivo.
Cof...cof...
Comenzó a toser mientras intentaba girarse pero le estaba costando horrores, su cuerpo temblaba tanto y no había caso, desistió de la idea. Un tenue resplandor verdoso se comenzaría a manifestarse en una de sus palmas apoyada en su estomago. Si quería seguir ese combate tendría que ponerse en pie primero, pero en ese estado sería muy pero muy difícil.
Estado de Mogura
9/80
– *+24
140/160
– *Si no se interrumpe la técnica A shit ton of poison in the pockets.
Técnicas utilizadas:
¤ Shōsen no Jutsu ¤ Técnica de la Palma Mística - Tipo: Apoyo - Rango: A - Requisitos: Iryō-Nin 30 - Gastos: 20 CK/turno - Daños: - - Efectos adicionales:
Recupera 24 PV/turno
(Iryō-Nin 80): Utilizando el doble de chakra ocasionará un colapso en el cuerpo del objetivo que le dejará inconsciente. Para este efecto necesita estar concentrado y sin interrupciones durante un turno entero.
- Sellos: - - Velocidad: Moderada - Alcance y dimensiones:
Cuerpo a cuerpo
(Iryō-Nin 60) La técnica puede utilizarse a una distancia de hasta un metro y medio del objetivo, sin necesidad de entrar en contacto directo con él. La curación se produce a menor velocidad, por lo que el objetivo sólo recuperará 12 PV por turno por el mismo gasto. No podrá producir colapsos de esta manera.
Esta técnica permite acelerar la velocidad de regeneración natural del cuerpo humano enviando chakra desde las manos del usuario, que se iluminan con una tenue luz verdosa, hasta la herida a sanar. Permite al ninja curar sin necesidad de equipamientos médicos o cirugía, por lo que es de gran utilidad en el campo de batalla. Puede usarse para tratar heridas externas e internas. Es vital emparejar con precisión la cantidad de chakra utilizado con la severidad de la herida, por lo que requiere de un preciso control del chakra, ya que enviar una cantidad excesiva de chakra en el cuerpo del paciente podría ocasionar un colapso en la circulación normal del paciente, ocasionando un estado comatoso temporal. Por esto, sólo unos pocos ninjas médicos lo suficientemente habilidosos son capaces de usar esta técnica. Sin embargo, sólo abarca heridas superficiales, por lo que las más graves apenas se verán afectadas.
4/06/2017, 00:09 (Última modificación: 29/07/2017, 02:36 por Amedama Daruu.)
La ola de agua impactó de lleno en el joven Mogura, quien rodó por el suelo hasta quedar boca abajo varios metros más allá, jadeante, pero consciente. Una especie de adrenalina sobrecogedora invadió a Daruu, quien dio un paso al frente con una sonrisa en el rostro y las pupilas cerradas fijas en su oponente.
Pero se detuvo.
«Sin embargo, debes tener cuidado con esa nueva aspiración tuya. El no querer perder puede llevar fácilmente al ansia de poder. Y ese ansia de poder puede llegar a convertirse en un arma de doble filo.»
Sonrió. «No te decepcionaré, Kori-sensei. Ya he ganado. Ya se ha acabado.»
Daruu dio un par de pasos más observando a Mogura, que trataba de girar sobre sí mismo tosiendo, con todas sus fuerzas. Levantó una ceja con curiosidad: la mano de su compañero brillaba con un chakra de color verdoso muy característico a través de su cuerpo, y el chakra se repartía uniformemente por los lugares más magullados por su técnica.
«¿Sabe medicina? ¡Qué guay!»
—Vaya, eres un ninja médico —dijo—. Eso es genial, Mogura-san. Lo siento, creo que me pasé un poco con mi última técnica. ¿Damos esto por finalizado?
»Mira tu estado. Está claro que he ganado.
120/120
–
98/140
– +10 (regen. dividida) 20 metros de hilo, 3 bombas de humo, 2 kunai y 1 antídoto en el portaobjetos, atado al muslo derecho 20 senbon, en 4 paquetes de 5 atados en el cinturón
4/06/2017, 19:20 (Última modificación: 29/07/2017, 02:36 por Amedama Daruu.)
Amedama Daruu era rápido y poderoso, pero no era un ente que caminase sin dejar escuchar sus pasos, al menos no todavía. El joven médico no pudo evitar sentir la necesidad de girar su mirada en la dirección a la que venía su contrincante, temía lo peor, aún así su mano no perdía el brillo verdoso.
—Vaya, eres un ninja médico. Eso es genial, Mogura-san. Lo siento, creo que me pasé un poco con mi última técnica. ¿Damos esto por finalizado?
Aquellas palabras no sonaban como algo que diría un ninja a punto de rematar a su oponente, sonaban literalmente a algo que diría un compañero de academia que le había dado una paliza en dos o tres tiempos a un humilde médico.
Estaba a punto de decir algo cuando el chico dejó escapar unas palabras mas de sus labios.
»Mira tu estado. Está claro que he ganado.
Su cuerpo se relajó totalmente en ese momento, no había necesidad de seguir esforzándose en mantener una guardia que no iba a servir para nada.
¿Esas son las palabras que le dedicas a tu oponente antes de darle el golpe de gracia? ¡Así no podré irme al otro mundo!
Dijo con una voz bastante agitada mientras giraba ligeramente su espalda para quedar totalmente acostado en el piso, su mano no paraba de brillar.
Has ganado, Daruu-san.
Declararía con una ligera sonrisa en el rostro para dejar escapar seguidamente una pequeña carcajada que no tardaría en convertirse en una tos que duraría un par de segundos.
4/06/2017, 19:31 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
Mogura destensó los músculos de todo su cuerpo, bajando la alerta. Daruu suspiró y dejó descansar también al suyo, que todavía estaba en estado de alerta. Desactivó su Byakugan y se sentó en el suelo, agarrándose las piernas flexionadas con ambas manos.
—¿Esas son las palabras que le dedicas a tu oponente antes de darle el golpe de gracia? ¡Así no podré irme al otro mundo!
Mogura giró sobre sí mismo para quedar boca arriba. Aquella mano brillaba con un fulgor esmeralda incluso sin el Byakugan activo. Daruu la observaba con total curiosidad.
—Has ganado, Daruu-san. —Rio y luego tosió un par de veces.
—¿"Podré irme al otro mundo"? Mogura-san, eres un dramático de pelotas —Daruu rio con él—. No tienes más que unas magulladuras y estás empapado. Mañana estarás mejor, hombre.
»Además si vienes a por otro pastel de fresa, te invito.
Dramatico de las pelotas, que término era aquel utilizado por su compañero de academia. Pero no había nada que pudiese hacer al respecto, la broma había sido correspondida. Aún así había algo que el joven Daruu parecía estar subestimando.
¿Mañana?
Preguntó mientras su mano trabajaba las zonas mas afectadas de su cuerpo.
Al cabo de unos minutos estaré caminando como si nada hubiese pasado.
Diría confiado de sus habilidades como shinobi médico.
No podría esperarse menos del mejor médico de Amegakure.
Habiendo dicho aquello, la idea de un pastel de fresa gratis no sonaba para nada mal.
Si solo es el pastel acepto, estoy un poco lleno de Mizurappa.
4/06/2017, 20:17 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
—¿Mañana? —dijo Mogura—. Al cabo de unos minutos estaré caminando como si nada hubiese pasado. No podría esperarse menos del mejor médico de Amegakure. Si solo es el pastel acepto, estoy un poco lleno de Mizurappa.
Daruu dejó escapar una carcajada.
—Tranquilo, te invitaré a un pastel, la bebida si la quieres la pagas —bromeó—. Y si algún día te apetece un poco más de Mizurappa sólo tienes que pedírmelo, te lo serviré con gusto.
Se levantó y se acercó a Mogura, agachándose un poco y extendiéndole el brazo para ayudarle a levantarse.
—Venga pues, vámonos antes de que alguien se queje de que estemos ocupando la sala de entrenamiento para charlar.
4/06/2017, 20:24 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
El joven mozo rió ante su comentario. Había perdido un par de años de vida con ese ataque pero no su habilidad para hacer reír a la gente, eso era bueno.
Postre gratis y bebida posiblemente también, no sonaba para nada mal. Por cosas así Mogura estaba seguro de que podía dirigirse hacía ese muchacho como Daruu-san y no como Amedama-san. Lo del Mizurappa podía esperar, un par de meses tranquilamente.
No contento con la generosa oferta, también le extendió la mano para ayudarle a ponerse de pie. Sin pensarlo mucho aceptó el gesto y se ayudo de él.
—Venga pues, vámonos antes de que alguien se queje de que estemos ocupando la sala de entrenamiento para charlar.
Peor aún, podrían hacernos limpiar esto.
Se permitió bromear un poco más, rara vez tenía oportunidad de hacerlo.
4/06/2017, 20:36 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
—Peor aún, podrían hacernos limpiar esto.
Daruu echó la vista atrás sin captar que era una broma y observó el gran charco de agua que había dejado su técnica.
—Probablemente se seque en cuestión de unas horas, el suelo es de tierra, se lo tragará también —explicó—. A propósito...
Se sacudió los pantalones a la altura del culo.
—Hala, me los he enguarrado. Mira que sentarme ahí.
Los jóvenes siguieron hasta el ascensor y bajaron a la planta base de la torre. Tras atravesar la puerta de salida, les recibió el agradable clima de la villa una vez más.
—Claro que no es un problema, ya se nos lava la ropa sola. ¡Qué maravilla tecnológica de aldea!
4/06/2017, 20:44 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
La dupla abandonó la zona de entrenamiento y bajo hasta lo más bajo que se podía bajar sin ir tan bajo como para llegar debajo de la superficie.
—Claro que no es un problema, ya se nos lava la ropa sola. ¡Qué maravilla tecnológica de aldea!
Mogura estaba a punto de abrir su paraguas en ese momento cuando se dio cuenta de que lo que decía su acompañante era cierto, la lluvia lavaría la suciedad de su ropa.
Bien pensado, Daruu-san. Bendito sea Amenokami.
Seguidamente volvió su paraguas a una posición mas relajada donde iba aguantado levemente con una de sus manos. Miró la lluvia caer y no pudo evitar recordar lo raro que se le habían puesto los ojos a Daruu durante la pelea.
Tus ojos, cambiaron al iniciar la pelea. ¿Por qué ha pasado eso?
Con su mano libre imitó el gesto que habían hecho las venas a los lados de sus cavidades oculares.
4/06/2017, 20:51 (Última modificación: 29/07/2017, 02:37 por Amedama Daruu.)
—Bien pensado, Daruu-san. Bendito sea Amenokami.
Daruu asintió enérgicamente con una sonrisa.
—Eso es —contestó—. Bendito sea Amenokami.
Estaba contento. Pletórico. ¿A qué se debía, a que había ganado o a que había hecho un nuevo amigo casi sin quererlo? Probablemente a las dos. Todavía sentía el fuego candente brillando en su pecho de cuando había lanzado aquél Mizurappa, y era todo un placer poder hablar y bromear con alguien tan relajadamente que no era de su familia, aparte de su compañera de misiones.
—Tus ojos, cambiaron al iniciarl la pelea. ¿Por qué ha pasado eso?
La pregunta le pilló desprevenido. Daruu detuvo sus pasos y le observó unos instantes, dudando si debía contestar o no.
—Es poco prudente contarle tus secretos a alguien si quieres volver a ganarle una próxima vez que te pida pastel de fresa y un poco de Mizurappa —bromeó—. Pero supongo que hoy te has ganado un poco de información. Te advierto que no será mucha.
»Es un doujutsu famoso, habrás oído hablar de el clan Hyuuga. Mi abuela era del clan, y yo nací con este don. Puedo ver el chakra de otros seres vivos y dentro de sus cuerpos.
Hizo una pausa.
—Y eso es todo lo que puedo contarte por hoy. Ahora, respóndeme tú una pregunta —dijo—. ¿Dónde aprendiste medicina? ¿No eres muy joven para saberla usar ya? He oído que se requieren años de entrenamiento.
4/06/2017, 21:03 (Última modificación: 29/07/2017, 02:38 por Amedama Daruu.)
—Es poco prudente contarle tus secretos a alguien si quieres volver a ganarle una próxima vez que te pida pastel de fresa y un poco de Mizurappa. Pero supongo que hoy te has ganado un poco de información. Te advierto que no será mucha.
Con bromas de por medio, Daruu accedió a desburrar un poco al joven médico de Amegakure.
»Es un doujutsu famoso, habrás oído hablar de el clan Hyuuga. Mi abuela era del clan, y yo nací con este don. Puedo ver el chakra de otros seres vivos y dentro de sus cuerpos.
Los ojos de Mogura se abrieron ligeramente mas de lo normal, se le ocurrían muchos usos para una clase de poder como ese, aunque la mayoría derivaban en usos médicos.
—Y eso es todo lo que puedo contarte por hoy. Ahora, respóndeme tú una pregunta
El cambio de información debía ser mutuo. Pero no tuvo oportunidad de acceder hasta que el muchacho formulase la pregunta.
¿Dónde aprendiste medicina? ¿No eres muy joven para saberla usar ya? He oído que se requieren años de entrenamiento.
Aprendí con mi maestro, que es también mi abuelo. Mi juventud eventualmente se terminará yendo con la pila de cosas que he leído y aún tengo por leer.
Pero confió en que mis habilidades no tendrán igual dentro de no mucho.
Hizo una pausa y pensó durante un par de segundos lo que iba a decir después.
Supongo que ese es uno de mis objetivos.
La lluvia no paraba de caer en ese día y probablemente no pararía de llover por un buen tiempo más. Aun así el tiempo seguía avanzando.