Cuentas pendientes

[Uchiha Datsue]

Akame fumaba. Kaido bufaba. Ayame dejaba su veneno y se iba. Daruu dialogaba. Datsue escuchaba. «Cada uno haciendo lo que mejor se le da», resumió para sí. Reprimió el amago de una breve sonrisa.

Daruu le pedía mucho. Demasiado, tras haberle preparado aquella pequeña emboscada. Pero, ¿acaso no había venido él también preparado? ¿Qué tenía que perder? «Nada», se recordó.

Alzó una mano al hombro de Daruu…

—Espero no arrepentirme de esto, Daruu —dijo, sin todavía entender cómo iba a conseguir que quedasen solos por simplemente cogerle el hombro.

… y levantó la otra tras la espalda de este, como si fuese a abrazarle. En su lugar, hizo figuras con ella. Pequeños gestos. Escribía, en el aire, un mensaje. ¿A quién iba dirigido este mensaje? No a Daruu, que no podía verlo desde su posición. No a Kaido, que ahora a espaldas de Datsue, menos podía verlo. Ni mucho menos a Ayame, que ya se había ido.

Sino a Akame. El único que podía leer aquellas señas con la misma facilidad que leer las letras de un libro. Era lo que tenía un año realizando misiones juntos. ¿Qué decía el mensaje? Bueno, por escrito, podía resumirse en tres palabras.

Tres simples y tranquilizadoras palabras.

2 AO mantenidas

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