20/04/2022, 11:16
Cuando el molesto sonido dejo de ser un inconveniente, Lyndis fue a seguir con la ofensiva, pero el amejin ya se había adelantado a ello, quien retenía a aquella mujer con algún tipo de fuinjutsu. Instintivamente, miró a su alrededor, por si quedaba alguien más que pudiera darles problemas, pero el resto de los combates estaban demasiado lejos de ellos en aquel momento. Su cuerpo empezó a perder musculatura, y el color rojizo se desvaneció de su cuerpo también.
— Estoy bien, tan solo tengo el cuerpo un poco entumeci- — un escalofrio recorrió su espalda, y pronto pasó a estar en todo su cuerpo presente hasta que un pequeño copo de nieve cayó sobre la punta de su nariz.
No tuvo que torcer demasiado su cuerpo para ver como un colosal ser se alzaba en la batalla; estaba formado en su totalidad de nieve, con un ligero y suave tono blanco que contrastaba con la expresión de enfado. Era algo cómico, y sonaba un poco estupido, pero el descenso de la temperatura en su alrededor junto a los gritos de quien intentaba alejarse, solo lo volvian una escena bizarra y algo dantesca.
— S-Sera una puta broma ¿no? — Dijo esbozando una sonrisa de incredibilidad, mientras respiraba pesadamente intentando estabilizar su cuerpo.
Se apresuró en agruparse con el resto, para evaluar la situación, y Nao no tardó en traer las nuevas noticias. Sonaba francamente horrible, pero Ranko afirmó tener una idea mientras la chica se centraba en terminar de curar sus heridas.
— Uhm... No creo que algo mucho mejor que tú, y además siento todo el cuerpo adormecido por aquellos impactos de agua — añadió rotando sus hombros sobre si mismos, mientras hacia una mueca de disgusto al no sentirse cómoda del todo. — Pero haré lo que me pidas, dame algo que golpear y será suficiente. Ese helado gigante, pero sobretodo quien haya sido capaz de crear algo así tiene que ser peligroso. Me gustaría poder recuperar algo de mis fuerzas antes de cruzarmelo, pero tu estas en un estado mucho peor
» En cualquier caso, te escucho con esa idea — su instinto le decía que seguramente sería algo peligroso, pero eso solo hacía que tuviera más ganas de intentarlo
— Estoy bien, tan solo tengo el cuerpo un poco entumeci- — un escalofrio recorrió su espalda, y pronto pasó a estar en todo su cuerpo presente hasta que un pequeño copo de nieve cayó sobre la punta de su nariz.
No tuvo que torcer demasiado su cuerpo para ver como un colosal ser se alzaba en la batalla; estaba formado en su totalidad de nieve, con un ligero y suave tono blanco que contrastaba con la expresión de enfado. Era algo cómico, y sonaba un poco estupido, pero el descenso de la temperatura en su alrededor junto a los gritos de quien intentaba alejarse, solo lo volvian una escena bizarra y algo dantesca.
— S-Sera una puta broma ¿no? — Dijo esbozando una sonrisa de incredibilidad, mientras respiraba pesadamente intentando estabilizar su cuerpo.
Se apresuró en agruparse con el resto, para evaluar la situación, y Nao no tardó en traer las nuevas noticias. Sonaba francamente horrible, pero Ranko afirmó tener una idea mientras la chica se centraba en terminar de curar sus heridas.
— Uhm... No creo que algo mucho mejor que tú, y además siento todo el cuerpo adormecido por aquellos impactos de agua — añadió rotando sus hombros sobre si mismos, mientras hacia una mueca de disgusto al no sentirse cómoda del todo. — Pero haré lo que me pidas, dame algo que golpear y será suficiente. Ese helado gigante, pero sobretodo quien haya sido capaz de crear algo así tiene que ser peligroso. Me gustaría poder recuperar algo de mis fuerzas antes de cruzarmelo, pero tu estas en un estado mucho peor
» En cualquier caso, te escucho con esa idea — su instinto le decía que seguramente sería algo peligroso, pero eso solo hacía que tuviera más ganas de intentarlo
¡Gracias a Ranko por el avatar!