4/05/2022, 20:02
(Última modificación: 6/05/2022, 07:42 por Akamatsu Nao. Editado 1 vez en total.)
No esperaba para nada que Ranko se lanzase de esa forma, siendo que él lo que menos quería es que ella resultase aún más herida. Sin embargo, gracias a ella logró dar de lleno a Hakai, el cual intentó lanzar un tajo al castaño, siendo que este pegó un brinco hacia atrás para evitar que le diera con el filo mientras observaba como cómicamente Hakai empezó a quejarse como un niño encaprichado.
Nao tuvo que aguantarse la risa aún en esa situación. ¿Los ideales de las aldeas o de Kurama? Nada de eso parecía importarle, pero todo había valido la pena solo por el hecho de ver a aquel sujeto con el traje sucio, aunque para su mala suerte, el líquido que le lanzó no pareció causarle demasiado daño. «Upsi.» Ciertamente no sabía como funcionaba el veneno aquel, pero sin duda fue mucho menos efectivo de lo que él esperaba. Tampoco pudo continuar su plan, pues aunque había contemplado que huyese, no pudo evitar que se fuese con el rabo entre las patas.
Miro a Ranko, siendo que la alegría de esa victoria moral no compensaba para nada todo el castigo que la kunoichi había recibido. No le dijo nada, pero la mirada de Nao cambió a una más triste, arrepentido de que las cosas llegaran tan lejos.
Ahora mismo Ranko y Lyndis estaban en muy mal estado, siendo que esta última aún estaba enfrascada en combate con el guardaespaldas. Sin embargo, siempre tenía en mente que antes de actuar, las decisiones no las tomaba él. Activó el sello de comunicación.
—Akamatsu Nao informando, Yuki Hakai está herido y ha huido con un Shunshin no Jutsu para refugiarse entre sus tropas — Mientras hablaba, colocó un pergamino en el suelo y dibujó de nuevo otra ave para montarse en ella.
Esperaba entonces una confirmación sobre cómo debían proceder. Perseguir a Hakai podría ser un poco suicida siendo que estaba muy bajo de chakra, y más aún intentando romper entre filas enemigas. Realmente no quería arriesgarse más, sus compañeras necesitaban tratamiento médico. Las órdenes eran detenerlo o ralentizarlo, aunque ciertamente estaba un poco frustrado por no haber logrado aniquilarlo. Estaba muy preocupado por la forma tan violenta en la que Ranko y Lyndis se estaban arriesgando, ciertamente temía que pese a su estado ellas quisieran seguir en combate. Si, era una guerra, pero no quería que se matasen por luchar hasta las últimas consecuencias. «Nuestro escuadrón está al limite. Hemos perdido a un integrante, y nuestras dos mejores combatientes ya no pueden más...» Una vez más, rogaba poder protegerlas, y también, que Ranko tomase la decisión de velar más su propia seguridad y la de todos.
«Aún tenemos que encargarnos de su jodido guardaespaldas.» Tenía que ayudar a Lyndis, costara lo que costara.
- PV:–
- CK:–
Shunshin 1/5
- Daños: -
- AO: -
Nao tuvo que aguantarse la risa aún en esa situación. ¿Los ideales de las aldeas o de Kurama? Nada de eso parecía importarle, pero todo había valido la pena solo por el hecho de ver a aquel sujeto con el traje sucio, aunque para su mala suerte, el líquido que le lanzó no pareció causarle demasiado daño. «Upsi.» Ciertamente no sabía como funcionaba el veneno aquel, pero sin duda fue mucho menos efectivo de lo que él esperaba. Tampoco pudo continuar su plan, pues aunque había contemplado que huyese, no pudo evitar que se fuese con el rabo entre las patas.
Miro a Ranko, siendo que la alegría de esa victoria moral no compensaba para nada todo el castigo que la kunoichi había recibido. No le dijo nada, pero la mirada de Nao cambió a una más triste, arrepentido de que las cosas llegaran tan lejos.
Ahora mismo Ranko y Lyndis estaban en muy mal estado, siendo que esta última aún estaba enfrascada en combate con el guardaespaldas. Sin embargo, siempre tenía en mente que antes de actuar, las decisiones no las tomaba él. Activó el sello de comunicación.
—Akamatsu Nao informando, Yuki Hakai está herido y ha huido con un Shunshin no Jutsu para refugiarse entre sus tropas — Mientras hablaba, colocó un pergamino en el suelo y dibujó de nuevo otra ave para montarse en ella.
Esperaba entonces una confirmación sobre cómo debían proceder. Perseguir a Hakai podría ser un poco suicida siendo que estaba muy bajo de chakra, y más aún intentando romper entre filas enemigas. Realmente no quería arriesgarse más, sus compañeras necesitaban tratamiento médico. Las órdenes eran detenerlo o ralentizarlo, aunque ciertamente estaba un poco frustrado por no haber logrado aniquilarlo. Estaba muy preocupado por la forma tan violenta en la que Ranko y Lyndis se estaban arriesgando, ciertamente temía que pese a su estado ellas quisieran seguir en combate. Si, era una guerra, pero no quería que se matasen por luchar hasta las últimas consecuencias. «Nuestro escuadrón está al limite. Hemos perdido a un integrante, y nuestras dos mejores combatientes ya no pueden más...» Una vez más, rogaba poder protegerlas, y también, que Ranko tomase la decisión de velar más su propia seguridad y la de todos.
«Aún tenemos que encargarnos de su jodido guardaespaldas.» Tenía que ayudar a Lyndis, costara lo que costara.
Estado de Nao
- PV:
190/190
- CK:
51/200
-10
– -36
–Shunshin 1/5
- Daños: -
- AO: -