27/10/2022, 19:55
—Si, creo que estás en lo cierto. Probemos si es así.
Por un momento, pensó que le discutiría. Era una de las primeras veces que había mandado a alguien nada. Seguía siendo Genin, cómo él, así que no tenía más autoridad que tener el sello de comunicación. Sin embargo, Hayato pareció estar de acuerdo con ella y empezaron su travesía hacia el norte.
Tardaron relativamente poco en llegar a donde ya no había un suelo completamente rojizo, sino barro removido y algún que otro cuerpo, o partes de cuerpo. El paso de Hayato era más bien lento incluso cuando parecía estar esforzandose al máximo. Si se alejaban demasiado del epicentro de la guerra sería más complicado encontrar ningún rastro.
— Vale, ahora hay que rodear para no salirnos demasiado. Algo encontraremos.
No haber encontrado el rastro directamente hizo que la confianza de Hana bajase levemente. ¿Y si se equivocaba? ¿Y si habían seguido avanzando? No, tenían que estar reagrupandose o huyendo, eran las opciones que Datsue había barajado. Aún era de noche cuando encontraron un enorme rastro saliendo del circulo. Marcas de ruedas y pisadas a tutiplen. No eran cuatro gatos. Definitivamente era por lo menos un cuarto del ejercito.
— Bien, bien. Vamos a seguir el rastro pero con cuidado. Solo hay que descubrir si se reagrupan o vuelven a su casa. Si nos detectan... — tragó saliva. — Mejor que no nos detecten y ya.
Sabía que ella podría huir. ¿Hayato? Tenía sus dudas. Y no se veía capaz de dejarlo atrás sin más. Quedaban un par de horas para el amanecer. Por suerte, para ellos no había tanta prisa como para tener que correr. Si llegaban y no había nadie, era que se habían ido. A menos que el rastro indicase que iban hacia la Villa de las Aguas Termales. Sin Datsue y con un general... ¿cómo los iban a detener?
Negó con la cabeza. Debían hacer lo que podían hacer, ni más ni menos.
— Vamos. — empezó a andar rápido por el lateral del rastro, atenta a posibles enemigos al frente.
Por un momento, pensó que le discutiría. Era una de las primeras veces que había mandado a alguien nada. Seguía siendo Genin, cómo él, así que no tenía más autoridad que tener el sello de comunicación. Sin embargo, Hayato pareció estar de acuerdo con ella y empezaron su travesía hacia el norte.
Tardaron relativamente poco en llegar a donde ya no había un suelo completamente rojizo, sino barro removido y algún que otro cuerpo, o partes de cuerpo. El paso de Hayato era más bien lento incluso cuando parecía estar esforzandose al máximo. Si se alejaban demasiado del epicentro de la guerra sería más complicado encontrar ningún rastro.
— Vale, ahora hay que rodear para no salirnos demasiado. Algo encontraremos.
No haber encontrado el rastro directamente hizo que la confianza de Hana bajase levemente. ¿Y si se equivocaba? ¿Y si habían seguido avanzando? No, tenían que estar reagrupandose o huyendo, eran las opciones que Datsue había barajado. Aún era de noche cuando encontraron un enorme rastro saliendo del circulo. Marcas de ruedas y pisadas a tutiplen. No eran cuatro gatos. Definitivamente era por lo menos un cuarto del ejercito.
— Bien, bien. Vamos a seguir el rastro pero con cuidado. Solo hay que descubrir si se reagrupan o vuelven a su casa. Si nos detectan... — tragó saliva. — Mejor que no nos detecten y ya.
Sabía que ella podría huir. ¿Hayato? Tenía sus dudas. Y no se veía capaz de dejarlo atrás sin más. Quedaban un par de horas para el amanecer. Por suerte, para ellos no había tanta prisa como para tener que correr. Si llegaban y no había nadie, era que se habían ido. A menos que el rastro indicase que iban hacia la Villa de las Aguas Termales. Sin Datsue y con un general... ¿cómo los iban a detener?
Negó con la cabeza. Debían hacer lo que podían hacer, ni más ni menos.
— Vamos. — empezó a andar rápido por el lateral del rastro, atenta a posibles enemigos al frente.