12/11/2022, 01:33
Hana ya tenía un plan en mente por si Hayato no era capaz de aguantar el peso, pero no tuvo ni tiempo de reacción porque parecía que ni siquiera había intentado sujetarlas.
—¡Joder! ¡joder! ¡joder! ¡Mi codo! ¡Ya lo tenía jodido y lo has terminado de fastidiar! ¡POR DIOS!
Para ella era jodidamente obvio que era Hayato cuando ni siquiera había hecho ningún cambio a su voz. Dejó caer ella también sus cajas para lanzarse sobre él de inmediato.
— ¡¿Qué haces?! ¡Cuidado que está herido! — se agachó haciendo como que le revisaba el brazo. — Levanta que te llevaré al barco y ya te quedas allí. Te dije que no hacía falta que cargases nada.
Procedió a intentar levantarlo con cuidado, como si de verdad estuviese gravemente herido en el brazo. Hacer como que uno de ellos estaba herido era una idea que había barajado, pero sin una excusa creible de cómo se había hecho la herida no podían hacerlo. Por suerte, ahora tenían excusa.
— ¡Joder! Si ni llevaba una venda ni nada, ¿cómo quereis que sepa que está lesionado? — se quejó soplando el hombre mientras procedía a recoger el desastre que acababan de causar.
— ¡Porque es más terco que una mula! Al final, te harás daño de verdad por nada. — suspiró con falso enfado.
Antes de que el hombre pudiese decirles nada más y si Hayato se lo permitía, lo arrastraría fuera del lugar sujetandole el brazo con cuidado. A ver si podían avanzar más sin problemas.
—¡Joder! ¡joder! ¡joder! ¡Mi codo! ¡Ya lo tenía jodido y lo has terminado de fastidiar! ¡POR DIOS!
Para ella era jodidamente obvio que era Hayato cuando ni siquiera había hecho ningún cambio a su voz. Dejó caer ella también sus cajas para lanzarse sobre él de inmediato.
— ¡¿Qué haces?! ¡Cuidado que está herido! — se agachó haciendo como que le revisaba el brazo. — Levanta que te llevaré al barco y ya te quedas allí. Te dije que no hacía falta que cargases nada.
Procedió a intentar levantarlo con cuidado, como si de verdad estuviese gravemente herido en el brazo. Hacer como que uno de ellos estaba herido era una idea que había barajado, pero sin una excusa creible de cómo se había hecho la herida no podían hacerlo. Por suerte, ahora tenían excusa.
— ¡Joder! Si ni llevaba una venda ni nada, ¿cómo quereis que sepa que está lesionado? — se quejó soplando el hombre mientras procedía a recoger el desastre que acababan de causar.
— ¡Porque es más terco que una mula! Al final, te harás daño de verdad por nada. — suspiró con falso enfado.
Antes de que el hombre pudiese decirles nada más y si Hayato se lo permitía, lo arrastraría fuera del lugar sujetandole el brazo con cuidado. A ver si podían avanzar más sin problemas.