30/12/2022, 22:35
Después de sus palabras esperaba por consecuencia que el tipo mínimamente reaccione a alguna manera, ya sea moviéndose, hablando o mirando. Luego esperaba que Ranko también responda, sabiendo si había la posibilidad o no de escapara rápidamente de esa celda mediante su fuerza, pues parecía la única que tenía los atributos necesarios para superar ese obstáculo.
Pero, al igual que el barco, todos esos asuntos parecían hundirse rápidamente y pasar a un segundo plano total. La maldita luz nuevamente se hizo presente, con el único objetivo de cegarles la vista momentáneamente, aunque ese no parecía ni el menor de sus problemas.
—¡MIERDA MIERDA MIERDA!
Miró a los dos kusajines, donde el pelirrojo había tomado la delantera. Con una desesperación total y mucho nerviosismo, salió disparada para golpear en carrera al mismo lugar que Toshio. Con el brazo pegado al cuerpo y usando su fuerza y peso para golpear de lleno a la puerta. No solo se hizo daño como una tonta, sino que, si la puerta no se abría, probablemente haya rebotado contra esta.
De los 3, parecía que Ranko era la más ágil para esa tarea y se puso a golpear aquella puerta con patadas. Jun se intento recomponer y vio aquella escena con ganas de ayudar, pero sabiendo bien que esa no era una batalla que podía resolver por su cuenta. Deseó con ansias que la pelilargo logre su cometido y se preparó para dar otro golpe a la puerta, solo si Ranko daba un intervalo entre sus golpes o si se cansaba en algún momento y no podía continuar.
Pero, al igual que el barco, todos esos asuntos parecían hundirse rápidamente y pasar a un segundo plano total. La maldita luz nuevamente se hizo presente, con el único objetivo de cegarles la vista momentáneamente, aunque ese no parecía ni el menor de sus problemas.
—¡MIERDA MIERDA MIERDA!
Miró a los dos kusajines, donde el pelirrojo había tomado la delantera. Con una desesperación total y mucho nerviosismo, salió disparada para golpear en carrera al mismo lugar que Toshio. Con el brazo pegado al cuerpo y usando su fuerza y peso para golpear de lleno a la puerta. No solo se hizo daño como una tonta, sino que, si la puerta no se abría, probablemente haya rebotado contra esta.
De los 3, parecía que Ranko era la más ágil para esa tarea y se puso a golpear aquella puerta con patadas. Jun se intento recomponer y vio aquella escena con ganas de ayudar, pero sabiendo bien que esa no era una batalla que podía resolver por su cuenta. Deseó con ansias que la pelilargo logre su cometido y se preparó para dar otro golpe a la puerta, solo si Ranko daba un intervalo entre sus golpes o si se cansaba en algún momento y no podía continuar.