4/09/2018, 11:02
(Última modificación: 4/09/2018, 11:03 por Tsukiyama Daigo.)
La bestia se deshizo del peliverde de un solo potente coletazo con la misma facilidad con la que él mismo se había deshecho de más de un insecto en su vida.
Salió disparado varios metros y rodó otros tantos más hasta que finalmente se detuvo. Dolía, dolía demasiado, pero de momento podía soportarlo.
Si se esforzaba, todavía podía levantarse una vez más.
—¿A quién coño se le ocurre saltar a la grada a una muerte inminente? Qué habría pasado si llega a estar, ¿eh? ¿Habrías parado tú uno de esos putos laseres con la boca?
La voz de Juro lo detuvo por completo.
Habían momentos en los que uno debía retirarse, esperar a un momento más indicado para actuar. Este era uno de esos momentos. Pues si se le ocurría volver a levantarse no solo podría morir, sino que sería en vano.
—Tsk —chasqueó la lengua y miró a otrl lado, maldiciendo su impotencia—, yo... pensé que podría haceros algo de tiempo... lo siento.
Juro pareció calmarse.
—Deberíamos buscar a Yubiwa-san y marcharnos de aquí rápido. Lo sabes, ¿no? Esto se va a descontrolar.
Sabiendo que Juro tenía razón, Daigo se puso de pie apoyándose sobre una de sus rodillas.
—Sí, vamos.
Salió disparado varios metros y rodó otros tantos más hasta que finalmente se detuvo. Dolía, dolía demasiado, pero de momento podía soportarlo.
Si se esforzaba, todavía podía levantarse una vez más.
—¿A quién coño se le ocurre saltar a la grada a una muerte inminente? Qué habría pasado si llega a estar, ¿eh? ¿Habrías parado tú uno de esos putos laseres con la boca?
La voz de Juro lo detuvo por completo.
Habían momentos en los que uno debía retirarse, esperar a un momento más indicado para actuar. Este era uno de esos momentos. Pues si se le ocurría volver a levantarse no solo podría morir, sino que sería en vano.
—Tsk —chasqueó la lengua y miró a otrl lado, maldiciendo su impotencia—, yo... pensé que podría haceros algo de tiempo... lo siento.
Juro pareció calmarse.
—Deberíamos buscar a Yubiwa-san y marcharnos de aquí rápido. Lo sabes, ¿no? Esto se va a descontrolar.
Sabiendo que Juro tenía razón, Daigo se puso de pie apoyándose sobre una de sus rodillas.
—Sí, vamos.
![[Imagen: IMG-20210515-202948-586.png]](https://i.ibb.co/fqtcMG8/IMG-20210515-202948-586.png)
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.