5/09/2018, 16:21
(Última modificación: 5/09/2018, 16:39 por Uzumaki Eri. Editado 2 veces en total.)
— ¿Qué? ¿¡QUÉ!? ¿Y por qué demonios no ha vuelto aquí? Kami-sama, bueno, ya da igual. Intenta que todos evacuen y que cesen de inmediato los conflictos innecesarios, diles a todos que solo ataquen si son atacados, que faciliten en lo posible que cada shinobi llegue a su barco.
«La verdadera pregunta es por qué había vuelto con Amedama Daruu esposado, señor...» Pensó para sus adentros para inmediatamente después asentir de nuevo, retirándose mientras él tomaba rumbo hacia el hospital.
Sin embargo, el caos que se arremolinaba a su alrededor se hacía cada vez más horrible.
—¡¡¡Eri!!! —rugió, tratando de llamar su atención—. ¡¡¡ERI!!!
La kunoichi se dio la vuelta para buscar con su mirada al dueño de aquellos chillidos, encontrando a Datsue todavía en el palco donde ellos se suponía que debían de haberse quedado los participantes. Intentó saltar hacia su posición, pero el ajetreo y la estampida de kusajines probablemente provocó más confusión entre las pocas gentes que quedaban por evacuar el sitio.
— No hay tiempo, tenemos que adelantarnos a todos estos locos e ir al hospital cagando hostias. ¡Eri! ¡Chico nuevo! ¡Stuffy! ¡Todos al hospital, ahora! ¡ESTÁN LOCOS ESTOS KUSEÑOS! ¡PRETENDEN LIARLA EN UN SITIO LLENO DE GENTE ENFERMA! Y ME REFIERO AL HOSPITAL, NO A SUS PUTAS VILLAS.
«¡¿Por qué no dejáis de chillar de una jodida vez...?!»
La kunoichi, harta y aturdida por todo el revuelo que estaba viviendo en unos momentos, subió y siguió a Datsue hasta su posición:
—¡Datsue! —exclamó—. ¡Deja de perder el tiempo aquí con cosas que no te llaman y lleva ese culo al que tanto tienes aprecio al hospital! ¿¡No ves a lo que nos estamos enfrentando?! ¡Puede que necesiten nuestra ayuda!
«La verdadera pregunta es por qué había vuelto con Amedama Daruu esposado, señor...» Pensó para sus adentros para inmediatamente después asentir de nuevo, retirándose mientras él tomaba rumbo hacia el hospital.
Sin embargo, el caos que se arremolinaba a su alrededor se hacía cada vez más horrible.
—¡¡¡Eri!!! —rugió, tratando de llamar su atención—. ¡¡¡ERI!!!
La kunoichi se dio la vuelta para buscar con su mirada al dueño de aquellos chillidos, encontrando a Datsue todavía en el palco donde ellos se suponía que debían de haberse quedado los participantes. Intentó saltar hacia su posición, pero el ajetreo y la estampida de kusajines probablemente provocó más confusión entre las pocas gentes que quedaban por evacuar el sitio.
— No hay tiempo, tenemos que adelantarnos a todos estos locos e ir al hospital cagando hostias. ¡Eri! ¡Chico nuevo! ¡Stuffy! ¡Todos al hospital, ahora! ¡ESTÁN LOCOS ESTOS KUSEÑOS! ¡PRETENDEN LIARLA EN UN SITIO LLENO DE GENTE ENFERMA! Y ME REFIERO AL HOSPITAL, NO A SUS PUTAS VILLAS.
«¡¿Por qué no dejáis de chillar de una jodida vez...?!»
La kunoichi, harta y aturdida por todo el revuelo que estaba viviendo en unos momentos, subió y siguió a Datsue hasta su posición:
—¡Datsue! —exclamó—. ¡Deja de perder el tiempo aquí con cosas que no te llaman y lleva ese culo al que tanto tienes aprecio al hospital! ¿¡No ves a lo que nos estamos enfrentando?! ¡Puede que necesiten nuestra ayuda!
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)