5/09/2018, 22:20
Y Daruu pagó el precio de no estar preparado.
Por supuesto, en Amegakure lea preparaban para muchas cosas. Para aguantar el dolor. Para rendir bajo la más cruel de las tormentas. Para espiar, para luchar, para matar.
Pero nadie le había preparado para eso. Para recibir aquella paliza.
No fueron los golpes allá en la Planicie del Silencio, ni el dolor cuando Akame le obligó a arrodillarse. Ni siquiera el puñetazo que lo tumbó en el suelo. Fue sin duda toda aquella verborrea. Que ninjas de la aldea en la que acababa de perder toda su confianza le vapulearan como si fuera un saco de boxeo verbal. Golpe tras golpe. Que Akame le acusara de que ni siquiera hubiera pensado en Ayame fue la puñalada que acabó con su fortaleza mental. A pesar de que no se tratase siquiera de eso. No se trataba en absoluto de eso.
Shanise, al menos para él, no se disculparía jamás. A Daruu aquello le parecía una humillación pública tal, que tenía la extraña certeza de que la mera sugerencia ocasionaría una batalla campal fuera del hospital —o dentro de él—. Todo estaba perdido. A no ser que el amejin ganase algo de tiempo. Si no hubiera cedido ante las provocaciones...
La aldea de la que venía Uchiha Datsue hablaba de ejemplaridad como si pudiera dar lecciones. Patético. Akame, en el fondo, nunca dejó de ser la Rata que casi le mata y que se vio arrastrada a disculparse en contra de su voluntad. Y a saber qué intenciones tenía al respecto de Ayame. Y Hanabi decía que en Amegakure tenían miedo de puñaladas traperas. Si es que te tienes que reir. No había mejor apulalador que Akame el General Rata. Se odio por estropearlo. Podría haberse ganado mejor el afecto de Hanabi. Así no tendría las esposas. Podría haber evitado que el General Rata y sus compinches...
Daba igual. Se rindió. Del todo.
Por eso cuando el Rey de las Ratas le cogio para darle el golpe de gracia, Daruu no trató siquiera de resistirse. Los ojos morados miraban muy atrás de Hanabi, sin vida, muertos. Su final había llegado...
...en su final, lo mataban envenenado, como si él, de hecho, fuera la rata.
Al menos, su último pensamiento sí fue para Ayame.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)